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¿Qué significa, concretamente, hacer contemplación eucarística?
En sí misma, la contemplación eucarística no es otra cosa que la capacidad, o mejor aún, el don de saber establecer un contacto de corazón a corazón con Jesús presente realmente en la Hostia y, a través de Él, elevarse hasta el Padre en el Espíritu Santo.
Todo esto, en el mayor silencio posible, tanto exterior como interior. El silencio es el esposo de la contemplación que la custodia, como José custodiaba a María. Contemplar es establecerse intuitivamente en la realidad divina (que puede ser Dios mismo, un atributo suyo o un misterio de la vida de Cristo) y gozar de su presencia. En la meditación prevalece la búsqueda de la verdad, en la contemplación, en cambio, el goce la Verdad encontrada (aquí “Verdad” está escrito con letra mayúscula, porque la contemplación tiende siempre a la persona, al todo y no a las partes).
Hoy Señor, estamos presentes ante Ti, para adorarte y alabarte en esta Hostia Santa que te hace presente entre nosotros y nos llena de tu amor infinito.
Señor, te pedimos que nunca perdamos la esperanza, que día a día se acreciente y podamos estar dándote gracias por todas las bendiciones que nos das y en especial por haberte quedado en el Santísimo Sacramento.
Señor, te amamos, te bendecimos y por eso estamos hoy aquí. Danos tu gracia para que nunca perdamos el valor de amar, que seamos capaces de ayudarnos unos a otros y de vivir siempre en el amor.
Los invito a enamorarse del Santísimo Sacramento del altar. ¡Adórenlo en sus parroquias! Así estarán unidos al mundo entero. Jesús será su Amigo y ustedes no hablarán de Él como de alguien a quien escasamente conocen. La unión con Él será alegría para ustedes y se convertirán en testigos del amor que Jesús tiene por cada criatura.
ADORACIÓN AL SANTÍSIMO SACRAMENTO DEL ALTAR, ORA ANTE JESÚS SACRAMENTADO, JESÚS VIVO EN LA HOSTIA CONSAGRADA.
“La adoración eucarística tiene como fin la persona divina de nuestro Señor Jesucristo presente en el Santísimo Sacramento. Él está vivo, quiere que le hablemos, Él nos hablará. Y este coloquio que se establece entre el alma y el Señor es la verdadera meditación eucarística, es -precisamente- la adoración. Dichosa el alma que sabe encontrar a Jesús en la Eucaristía y en la Eucaristía todas las cosas...”.
“La adoración eucarística tiene como fin la persona divina de nuestro Señor Jesucristo presente en el Santísimo Sacramento"
Pan vivo que bajaste del Cielo, ten misericordia de nosotros. ... Oración al Santísimo Sacramento · Exposición y bendición con el Santísimo Sacramento