Desafíos para la humanidad

La pandemia de COVID-19 ha condicionado todas las agendas. Pero el inicio de un nuevo año siempre es ocasión para reflexionar sobre los problemas que nos rodean y establecer los objetivos de solución necesarios.

Y más allá de la pandemia, y esa pequeña luz de esperanza que traen las distintas vacunas que se ofrecen, el mundo y la humanidad siguen agobiados por las guerras, el cambio climático, las migraciones, las desigualdades sociales y en general el respeto a los derechos humanos en todo el planeta, especialmente con los colectivos más vulnerables. 

A nivel internacional los cuatro años de mandato de Trump han supuesto un grave retroceso en estos objetivos, empezando por haber socavado los principios democráticos y los derechos civiles. Necesitamos un mundo que supere esas visiones nacionalistas.

Así, en relación a las vacunas contra el COVID-19 hemos de garantizar la adquisición y suministro de vacunas para las naciones que no pueden permitirse competir en el mercado. Sin embargo, la Unión Europea y los países más ricos del planeta, se han posicionado en contra de liberalizar las patentes de las inmunizaciones y medicamentos contra la covid-19.

Urge trabajar por el desarrollo sostenible de todo el planeta. En este sentido la cancelación de la deuda externa de los países más pobres sería muy deseable, además de adoptar medidas para este periodo de emergencia. Por desgracia, la bajada de las rentas nacionales de todos los países como consecuencia de la crisis va a suponer un menor porcentaje de ayuda al desarrollo.

Respecto al cambio climático tenemos nuestra casa en llamas y muchos no lo quieren ver. Si no se adoptan las medidas necesarias condenamos a la infancia de hoy y a las generaciones venideras a un mundo de destrucción, miseria e inestabilidad.

Derehos humanos: En esto tiempos de inestabilidad, muchos gobiernos han hecho de su capa un sayo y han aprovechado para reprimir aún más a los ciudadanos. Necesitamos impulsar la libertad, la justicia y la democracia en todo el mundo.

Finalmente hemos de afrontar el tema de las migraciones. Los números son apabullantes. Pero detrás de los números hay personas e historias individuales, cada uno con su nombre y apellido. Es necesario establecer soluciones en origen y cauces de acogida para los que llegan.

Y por hoy no digo más. Colorín, colorado este cuento se ha acabado.

Imagen de internet.