El abogado de los pobres

En la época medieval, a pesar de que todos los súbditos tenían derecho a la justicia, ésta se impartía partiendo del principio de la desigualdad ante la Ley, conforme a la sociedad estamental de la época. No obstante, consciente del elevado número de pobres que existía, y en función de principios cristianos, se consideró que debían contar con algunas garantías en los juicios.

Surge la figura del "abogado de los pobres", que tendría una regulación legal en el siglo XIV. Los abogados de pobres del ámbito jurídico más local solían ser remunerados con cargo a los bienes comunes del Concejo.

Así en Cartagena, los archivos municipales registran el nombramiento en 1613, de un tal Julián Báez de Padilla como "abogado de los pobres" asignándosele un salario de 4.000 maravedíes al año.

El abogado de pobres entró en decadencia al final del siglo XVIII, ya que los Colegios de Abogados instituyeron el turno anual de oficio, ya claro precedente del que terminaría por institucionalizarse en la época liberal.

Imagen: Óleo sobre tabla de Pieter Brueghel el Joven con un doble título, "El abogado del Pueblo" u "Oficina del recaudador de impuestos". Galería de Arte de Australia del Sur.