El Arco del Triunfo de París

En el otro extremo de los Campos Elíseos, en la antigua Plaza de la Estrella, hoy llamada de Charles de Gaulle, encontramos otro icono de París: el Arco del Triunfo. Napoleón ordenó su construcción en 1806 al finalizar la batalla de Austerlitz. Se encargó de ello el arquitecto Jean-François Chalgrin que se inspiró en el Arco de Tito de Roma y su construcción duró treinta años,  terminándose en 1836 durante el mandato de Louis-Philippe. 

En la base del Arco del Triunfo encontramos la Tumba del Soldado Desconocido, un monumento erigido en 1921 que con una llama siempre encendida representa a todos los franceses que murieron en la Primera Guerra Mundial y nunca fueron identificados. Cuando estábamos allí, tuvo lugar una ceremonia de homenaje, organizada, probablemente, por alguna organización de patriotas.

El Arco del Triunfo ha sido testigo de innumerables momentos históricos entre los que podríamos destacar: el paso de los restos mortales de Napoleón el 15 de diciembre de 1840 y los desfiles militares de las dos guerras mundiales en 1919 y 1944.

Para acceder al centro de la plaza, donde se ubica el monumento, es necesario utilizar los pasos subterráneos.

En los cuatro pilares del arco están grabados los nombres de las batallas ganadas por los ejércitos napoleónicos y los de 558 generales franceses, algunos de los cuales murieron en combate y sus nombres se encuentran subrayados. Lo curioso es que vemos cerca de 30 localidades españolas, donde parece que "triunfaron". Algunas aparece en francés y quizás eso nos despiste. Es el caso de Tortose, que es Tortosa; Sagonte, que es Sagunto; Valence, que es Valencia; o Saragosse, que es Zaragoza. También Lérida, Ocaña, Alba de Tormes, Ciudad Rodrigo, Olivenza, Gerona, Astorga o Fuentes de Oñoro entre otras. Olvidan, naturalmente, que al final salieron de España con el rabo entre las piernas. Y, por tanto que podríamos oponer otro largo listado de derrotas francesas: Bailén, Arapiles, Vitoria, Chiclana y otras muchas, o la batalla del Bruch, con aquella bonita historia del niño del tambor .....