¡Feliz Navidad!

"Y va a dar a luz un hijo, y le pondrá por nombre Emmanuel, Dios con nosotros." (Is. 7, 14).

La Navidad está secuestrada. Muchas luces, muchos colores, mucha música, mucho marketing, muchas comidas, mucho ruido. Todo ello ha suplantado al auténtico sentido de la Navidad: la conmemoración del nacimiento de Jesús, el Hijo de Dios.

Un niño nació entre silencios nocturnos, en la noche estrellada, con la fresca brisa de la buena nueva y al que los pastores descubrieron en brazos de su madre. Un niño nació humilde, entre las nada asépticas pajas de un establo que sirvió como paritorio. Un niño al que el profeta Isaías llamó Emmanuel, Dios con nosotros.

Un niño que habría de predicar el amor, la verdad y la justicia. Un niño que miraría a los pobres, a los emigrantes, a los sin techo, a los enfermos, a los ancianos, a las viudas indigentes. Un niño que proclamó la universalidad sin fronteras, que rehuyó de los políticos, que denunció las hipocresías de los clérigos y los negocios sucios de los ricos. Un niño que daría la vida por la salvación del hombre.

Parémonos un momento. Vayamos más allá de todas esas luces y miremos la estrella y como los pastores, descubramos la alegría sobria, pero intensa, que contiene la auténtica Navidad, la del Hijo de Dios encarnado, Dios con nosotros.

Este fotolog desea a todos sus amigos y visitantes unas felices fiestas de Navidad.

Imagen: Adoración de los Magos, de Alberto Durero. Galería Uffizi de Florencia.