Insectos en la dieta.

Ya sabemos lo que pasa con las redes sociales. Un comentario erróneo o falso, se extiende como una mancha de aceite. En los últimos tiempos se viene diciendo que la Unión Europea estaría planeando obligarnos a consumir harina de gusano e insectos en nuestra dieta.

Sin embargo esto, dicho así, resulta falso. Es cierto que los insectos son una fuente excepcional de proteínas, con valores biológicos comparables a los de la carne de vacuno o cerdo. Y también es cierto que desde 2018, la UE ha autorizado el uso de determindos insectos, siempre bajo estrictas regulaciones y que ahora se ha aprobado el Reglamento 2025/89 que autoriza la comercialización de polvo tratado con radiación ultravioleta de larvas de Tenebrio molitor o gusano de la harina. 

Pero eso no significa en modo alguno que vayan a usar ese ingrediente en tu comida sin que tú lo sepas. Su inclusión en un producto no será nunca un secreto: deberá aparecer claramente en la lista de ingredientes bajo su denominación oficial, además de advertencias sobre posibles reacciones alérgicas, especialmente para quienes sean sensibles a los crustáceos.

En todo el mundo se consumen más de 1.900 especies de insectos comestibles, ya que proporcionan proteínas y nutrientes de alta calidad, según la FAO y su consumo se irá incrementando en un futuro, pero dentro de la UE, nadie estará obligado a comerlos