La Ronda de Noche

En los siglos XVI y XVII, Amsterdam era la principal ciudad mercantil de Europa y contaba con tres milicias cívicas: al de ballesteros, la de arqueros y la de arcabuceros. En tiempos de guerra y disturbios, las milicias cumplían la función de proteger a la comunidad.  

"La ronda de noche" de Rembrandt Harmenszoon van Rijn (1606-1669),  late llena de vida: redobla un tambor, un perro ladra, se alzan lanzas y mosquetones, ondea una bandera, los niños corren en todas direcciones.  

Lo único extraño es que el tema representado no es una ronda de noche. Titulado primeramente "La compañía del capitán Frans Banning Cocq", en el siglo XIX el cuadro estaba tan deteriorado y oscurecido por la oxidación del barniz y la suciedad acumulada, que sus figuras eran casi indistinguibles, y parecía una escena nocturna. Por ello se interpretó erróneamente, cambiándole el título. Se trata en realidad de un retrato de grupo, que los arcabuceros de Amsterdam le encargaron en 1640. Retrata a los miembros de la milicia antes de dirgirse a participar en un desfile tradicional que quizá se hiciera para celebrar la visita de la reina de Francia, María de Medici. Saliendo de un recinto oscuro, la luz exterior ilumina poderosamente a los personajes. 

Es muy probable que el enorme cuadro, con sus personajes de tamaño real, colgara en el salón de celebraciones de la sede de los arcabuceros. En 1715 fue trasladado al Ayuntamiento de Ámsterdam, sufriendo una mutilación ya que fue cortado para adaptarlo al espacio disponible. Hoy se puede ver en el Rijksmuseum de la capital holandesa, siendo considerado como una obra maestra.