Por los caminos de España: Ciudad Real

Continuando nuestro caminar por el Campo de Calatrava, llegamos a Ciudad Real, la capital provincial, ciudad con 75.000 habitantes. Su economía depende en gran parte de los servicios, el turismo, la caza, la actividad agropecuaria y, en menor medida, de la industria.

Su origen hay que buscarlo a escasos 8 km en el Parque Arqueológico de Alarcos-Calatrava. Tras la Batalla de Alarcos, en 1195, que supuso una grave derrota para los cristianos, comienza el declive de Alarcos. Alfonso X es incapaz de repoblarla por lo que trasladó sus habitantes a una aldea próxima llamada Pozo Seco de Don Gil y allí funda Villa Real en 1255.

De las ocho puertas que se abrían en su poderoso lienzo amurallado medieval, solo se conserva la Puerta de Toledo, construida en 1328 y declarada Monumento Nacional en 1915. Consta de seis arcos, ojivales los dos exteriores y de herradura los cuatro interiores. 

De su arquitectura religiosa destaca la Catedral de Santa María del Prado. Construida en distintas etapas la parte más antigua es la puerta situada a los pies del templo, de finales del XIII. Llama la atención la impresionante torre de cuatro cuerpos, reconstruida en el siglo XIX, tras el terremoto de Lisboa. Cuenta en su interior con un magnífico retablo de 1616 obra del escultor Giraldo de Merlo y del pintor Juan de Hasten. De imprescindible visita es la Iglesia de San Pedro, gótica del siglo XIV. Su fachada luce un magnífico rosetón y una esbelta torre rematada por chapitel del siglo XVIII. El interior, de planta basilical de tres naves con notables obras artísticas y el coro con sillería del siglo XVI.

No podemos marcharnos de Ciudad Real sin visitar en la antigua estación de ferrocarril, el Museo del Quijote, junto al parque de Gasset, inaugurado en 2001, que alberga una colección bibliográfica con más de 3.500 volúmenes relacionados con la obra de Cervantes, pintura, escultura y diversos materiales relacionados con la genial obra.

Imagen de internet. Plaza Mayor de Ciudad Real