Siempre, siempre

Si en nuestra anterior actualización hablábamos de la disposición al trabajo, por encima de todas esas pequeñas adversidades, hoy con este espíritu del Credo Legionario, hablamos de una disposición total. 

Nos dicen actualmente los psicólogos que para poder desarrollarnos de una manera plena y eficaz necesitamos estar a gusto con lo que hacemos, amar el trabajo que tenemos en la medida de lo posible. Por eso es importante la vocación. Y cuando sintamos esa vocación estaremos dispuestos para el trabajo "de día, de noche, siempre, siempre".

Esto en el estamento militar es especialmente importante. Yo recuerdo en la Primera Guerra del Golfo, cuando España mandó unas fragatas para misiones de retaguardia, que mientras los militares vocacionales iban con decisión, algún que otro llenó la lavadora de calzoncillos malolientes.

No ocurre esto con los legionarios. Yo recuerdo en 1974 cuando Hassan II comenzó a mostrar sus intenciones anexionistas del Territorio del Sáhara Occidental, a muchos de ellos se les iluminaba la cara con la idea de entrar en acción. Y para todos fue decepcionante conocer los Acuerdos de Madrid, firmados el 14 de noviembre de 1975. En tiempos recientes su presencia en las misiones internacionales, algunas tan duras como la de Afganistán, refrendan este principio. 

ESPÍRITU DE ACUDIR AL FUEGO

La Legión, desde el hombre solo hasta La Legión entera, acudirá siempre donde oiga fuego, de día, de noche, siempre, siempre, aunque no tenga orden para ello. 

Imagen. lalegion.es