var isMobileBrowser=false;
Muy cerca de mi ocaso, yo te bendigo vida.
Por que nunca me diste, ni esperanza fallida,
ni trabajo injusto, ni pena inmerecida.
Por que veo al final de mi rudo camino,
que yo fui el arquitecto de mi propio destino
Que si traje la hiel o la miel de las cosas,
fue por que en ellas puse hiel o mieles sabrosas
Cuando planté rosales, coseché siempre rosas.
¡ Cierto !, a mis lozanías va a seguir el invierno.
Mas Tú, no me dijiste que Mayo fuese eterno.
Hallé sin dudas largas, las noches de mis penas.
Mas, no me prometiste tan solo noches buenas.
En cambio tuve otras sanamente serenas.
Preciosa Poesía ! Gracias por pasar por mi Fotolog. Un besos.
Preciosa imagen y precioso poema. Besos