Ya se fue el sábado, y aún sigo cansada!!!

El mar.

El mar siempre ha sido como mi pulmón, el lugar donde cogía aire para seguir respirando.
Ahora cuando veo el mar, solo puedo ver tu imagen, y cambiar el rumor de las olas por las mentiras que se vertieron de tu boca.
Y mi alma mira al horizonte, y en él se pierde mi aliento, deseando estar lejos, con papá teniéndome entre sus brazos, que fue la única verdad de mi vida.
Miro al horizonte, y respiro profundo, intentando cargarme de buenas vibraciones, pero el pulmón anda oprimido después de que ese amor que sentía tan hermoso y bonito, y que pensaba era correspondido, se destruyera en un segundo, mostrando que solo uno amo, y eso uno, fui yo.