CADENA DE FAVORES

Existen otras opciones que permiten mitigar el impacto del alto coste de la vida: las cadenas de favores. Esta iniciativa colaborativa permite intercambiar "favores" con otros sin necesidad de realizar un desembolso económico. Es decir, es una vía para que conocidos, vecinos o una comunidad se ayuden entre ellos de forma desinteresada.  La idea se basa en la siguiente: una persona realiza una serie de favores a ciertas personas y, a cambio, ellas le devolverán el favor ayudando a otras y así sucesivamente, de modo que acaba activando una cadena. Imagina que se te ha roto una tubería y necesitas un fontanero, en este caso un profesional puede ir a realizar el arreglo y, en lugar de pagar con dinero, devuelves ese "favor" con otro que puedas proporcionar, no necesariamente a la misma persona. 

Para que esto sea realmente efectivo se necesita un conjunto de personas dispuestas a ofrecer y recibir conocimientos, servicios o productos, ya sea formando un grupo pequeño entre conocidos o siendo parte de una gran comunidad, como es el caso de diversas asociaciones que han nacido en España.En el momento de la verdad, el que me puede ayudar es mi vecino o las personas que tengo cerca, además de lo beneficioso que resulta crear vínculos con gente motivada a echar una mano, puesto que "no solo se brinda un producto o servicio, sino que también se genera esperanza y confianza".

(Alexandra S.)

Creo recordar que cuando el confinamiento se comentó algo de la cadena de favores. Si se necesitaba un servicio de algo alguien te lo hacía "gratis" mientras que tú hacías lo mismo con otra persona, cada uno aportando aquello que sabía hacer. Se basaba en la ayuda entre vecinos , esto fue algo que se potenció mucho en esos meses que ya casi no queremos ni recordar. Por ejemplo, si alguien necesita unas clases de francés, se le pueden dar gratis mientras que ese alguien por ejemplo te ayuda en una mudanza.

Creo que en teoría es algo bonito y positivo pero muy difícil de llevar a la práctica a nivel global, fuera del ambito de un vecino muy amigo o un familiar. Yo soy partidaria de hacer favores siempre sin esperar nada a cambio, no lo hago por interés, sino por la satisfacción de poder ser útil a los demás. Pero no todos somos así. Ya lo djo Luther King: Nada se olvida más despacio que una ofensa; y nada más rápido que un favor. Haz favores, pórtate bien siempre con una persona y aunque no lo entiendas, al final quedará en el olvido. Pero peor para ellos.  En la foto, el reflejo de los jarroncitos, al cudrado.

Besos.