Cuando este artículo vea la luz, ya será casi primavera. Los cerezos habrán florecido ya sin timidez, las hojas de los melocotoneros perderán la adustez del invierno y las calles se llenarán de chicas en shorts y camisetas de tirantes, aunque muchas lleven bufandas en las mochilas y en los bolsos. Mucha gente como yo correrá a las farmacias a por antihistamínicos al primer estornudo y los dueños de los bares cerrarán las estufas que ocupan un lugar desmesurado en las terrazas de invierno. Volverá con fuerza alguna moda absurda que dejó de estar de moda hace algunos lustros: quizá el yoyó, los calentadores, la sombra de ojos color pavo real o los pantalones de chándal con tacones. Unos dirán que hace mucho calor para ser marzo y otros que sí, pero que hace más fresquito que el año pasado. Como cada año, habrá gente que se siente renacer al ritmo del retorno de las golondrinas y jilgueros, mientras que otros nos sentiremos embargados de una extraña tristeza estacional, esa que divide a los médicos, que ya no saben qué tónico, pastilla o remedio darnos para que acabemos la estación con dignidad y sin que corra la sangre.
(Isabel Coixet)
Totalmente cierto. En vísperas de la llegada oficial de la primavera, vivimos momentos de grandes contrastes. Un día sube la temperatura a más de 20 grados, al siguiente, baja a 5, y al siguiente vuelve a llover para de nuevo despejarse y ascender la temperatura. Al menos es así cómo ocurre en mi tierra. Es lo típico de la inestabilidad de esta estación. Por eso no es de extrañar que por la calle se vea a la gente vestida de manera extraña. Un día tienes calor y aunque por la mañana hacía más que fresco, al mediodía sobra el chaquetón. Bueno pues entonces ves a muchos que se pasean en manga corta y piensas que no es para tanto. Al día siguiente, ves a los mismos con anorak, capucha y una maxibufanda alrededor del cuello como si no hubiera un mañana. Y piensas que tampoco es para tanto...
La primavera (ha venido y nadie sabe coómo ha sido) es así. Hay quien se entusiasma y se esponja, mientras que otros empiezan con esas alergias que no sueltan en meses. Y por lo tanto, están deseando que pase. Contrastes, contrastes...
Aún así, su llegada es inevitable, y su marcha también, todo es cíclico. Como dijo Gibran: "En el corazón de todos los inviernos vive una primavera palpitante, y detrás de cada noche, viene una aurora sonriente".
Besos.
Todo son contrastes, pero estamos deseando que la primavera llegue ya, por si consigue "suavizar" ciertos ambientes.
Buenas noches .
Gran verdad las palabras de Coixet y las tuyas .
Gran verdad .
Por aqui pasa igual...por las mañanas hace su "fresquito", aunque cada vez menos ...yo bajo aun al periodico, abrigado (no mucho ya ) pero luego , sobre las 9 y algo empieza a subir la temperatura .
Si el dia es soleado , al mediodia hace calor y la gente vá como en verano .Daño a los ojos , siempre digo yo...eso de ver a una persona de verano cuando aun no lo és , me hace un pcoo de repelus...
O al reves...si el dia amanece nubladote , el fresquito continua ...
Y como bien dices ...uno no sabe que ponerse .
En fin que , tú lo has dicho mucho mejor y yo solo ,casi, he repetido vuestras palabras , vuestras reflexiones.
Lo que no puedo repetir es la belleza de esta rosa ...preciosísima .¡¡¡
Y yo desde luego, feliz como una perdiz con la Primavera .
Besos.
Te he dejado mensajitos desde el día 3 al 8.
Sí que hay muchos contrastes en primavera. Estaba haciendo calor, y esta semana pasada se llevó la mitad de ella lloviendo, y de pronto un día amanece de nuevo soleado y como si no hubiera pasado nada. Aquí la gente ya va más o menos veraniega, pero la chaquetita que no falte aún.
Y zapatos de verano aún tampoco, todavía cerrados. Aunque siempre te ves a alguna loca por ahí jaja o a adolescentes, que está claro que a esa edad se tiene una temperatura corporal más elevada jaja
Nosotros hemos tenido un fin de semana maravilloso. Es el primer fin de semana que salgo sin abrigo. Una rebeca y eso sí, pero abrigo no. Aún es pronto de todos modos para dejar las medias y las botas, aunque en esta ocasión ya las he llevado de las cortitas, no las otras, que esas ya creo que dan demasiado calor... en fin, que sí que se ve un poco de todo. Pero vaya, bufandas ya p9or aquí... como que no.
Aunque supongo que aún nos sorprenderá el frío en alguna ocasión.
eliocroca2Hace 19 minutos
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