Un día a la semana, mi amigo va a recoger a su hijo al cole. Se trata de uno de esos colegios pijoprogres, con papis modernos y enrollados, donde a las criaturas se les quita horas de Lengua, de Historia y de Ciencias para darles Valores y Buen Rollito, Estabilidad Emocional, Dinámica de Grupo, Gramática de Género y Génera, Convivencia de Civilizaciones y otras materias de vital importancia.
La mala fama de Paco en el colegio de su hijo viene de la cosa alimentaria: la merienda. No hay una sola madre con hijo allí que no sea una talibán de la alimentación sana; y como el gran enemigo de las madres progres son la harina refinada y las bebidas carbonatadas, cuando acuden a buscar a los niños todas van provistas de fruta ultrasana, zumo de papaya virgen, pan de pipas, pan integral con levadura madre enriquecida con semillas, jamón york ecológico, queso de leche de soja o tortilla de huevos de gallinas salvajes que viven en libertad, igualdad y fraternidad. Los carbohidratos, naturalmente, sólo se consienten en los cumpleaños; y según cuenta Paco, basta pronunciar la palabra Nocilla para ganarte una oleada de miradas asesinas. Al principio, dice, esperaba a su hijo en la puerta del cole con la moto y un donut o un bollicao. «Y como los otros críos miraban al mío con envidia, no puedes imaginarte el odio con el que me trataban algunas madres. Como si fuera un terrorista. Hasta dejaron de invitar a mi hijo a los cumpleaños ». Alguna, incluso, hasta se ha chivado a la del niño: «Deberías vigilar lo que le da de comer tu ex marido».
(A. Perez- Reverte)
Parece una parodia pero no lo es. Estamos llegando a unos niveles de pijerío en esto de la comida que a veces roza la caricatura. A una amiga mía de toda la vida y a la que siempre le ha gustado la comida contundente ahora le ha dado por frecuentar tiendas donde todo lo que venden es ecológico y además a unos precios desmesurados. Mira todas las etiquetas y se ha hecho talibana del comer sano (¿sano?). Ella es mayor y no tiene hijos pero hay madres, como las que Pérez-Reverte llama pijoprogres que inculcan estas cosas a los niños y los pobres se pasan unas ansias tremendas cuando ven a un compañero zampándose un bocadillo de nocilla o de quesitos.
Hay que tener cuidado con la dieta de los niños, procurar que no abusen de las chuches, que no se pasen con las grasas, para no criar unas criaturas que el día de mañana sean obesas, pero tampoco pasarse con esa rigidez que hace que se les robe la infancia. Yo recuerdo cuando me daban para merendar pan con chocolate que sabía a gloria.
Anda que si los compañeros del hijo de Paco pillan este mostrador de una chocolatería suiza...
Besos.
Digo yo que si la humanidad lleva existiendo varios millones de años y ha progresado (no en todos los individuos de la especie, porque algunos actuales parecen ejemplares perfectísimos de Homo Antecessor o de Homo Neanderthalensis) no será tan difícil eso de sobrevivir a costa de la naturaleza. Los antiguos griegos no consumían alimentos ecológicos ni vivían obsesionados con "comer sano", pero eso sí, inventaron la democracia, dieron forma a una Filosofía que es base de la nuestra y crearon un arte que debería producir sonrojo a más de cuatro "artistas" actuales. También decían algo muy cierto, que la virtud está en el término medio.
Me paso a dejarte un saludo
Muy buena pinta
saluds
Totalmente de acuerdo contigo y con Perez-Reverte
Estamos locos ?????
Feliz fin de semana y un besito @maravillas10
Buenassss.....
Madre mia la de bocadillos de pan con chocolate que habia tomado yo...en el colegio , en el recreo de la tarde nos daban para merenddar un pan y chocolate ...y no estaba rico ni nada ...¡¡¡
Y los bocadillos de chorizo , y de pan con aceite y azucar que estaban de muerte ...
Ahora , dale a los niños pan con chocolate ...pero bueno , todo seria entre los colegios y los padres ponerse de acuerdo .
Y todas esas "comidas" ecologicas lo unico que te hacen es sacarte el dinero, porque mira que son caras ...
Besos ¡¡¡ ya casi de fin de semana .
Pues mira, mi hermana no llega tanto, y tampoco es pija, más bien es hippy, y lleva a sus hijos a un colegio público de los de toda la vida. Pero aún así, sí que le encanta la comida sana y las cosas ecológicas, y tal y cual. De hecho ella va a Alcampo, supermercado el cual tiene una línea que parece ser que a ella le gusta de productos ecológicos, donde le compra a los niños unos yogures especiales. También cuando los niños eran más bebés, le hacía ella las papillas y los potitos, pues decía que los que vendían ya hechos traen conservantes y cosas que no son adecuados para la alimentación de un niño.
Aunque claro, cuando vienen a la casa de la abuela (de mi madre), pues comprenderán, se comen lo que hay. Mi madre siempre les compra yogures y cosillas para cuando van a su casa, pero no compra nada ecológico. Y los niños tan contentos y tan sanos. Vamos, que mi madre sabe muy bien lo que se hace, que ya crió a tres hijos y estamos los tres muy sanos jaja
De hecho yo cuando chica he comido pan con nocilla, con chocolate, palmeras, cañas, donuts, medias lunas... en fin, no es algo que hiciese todos los días, pero vaya, que nos pegábamos nuestras buenas meriendas, y mira, tanto yo como mis hermanos somos tres adultos de lo más normal y corriente.
Así que todas esas obsesiones son chorradas. Es mi humilde opinión.
El mostrador que nos muestras (nunca mejor dicho jaja) es un auténtico pecado y una auténtica tentación xD
Que por cierto, se me olvidaba, precisamente ahora estoy leyendo a Pérez-Reverte. Es el primer libro suyo que leo de hecho. En fin, ya informaré al respecto cuando toque en alguna actualización de fin de semana jaja Y digo cuando toque, porque aún me queda la mitad del libro, y me está gustando. Ala, ahora te dejo con la intriga de saber qué libro es jajaja mala gente soy xD
angela.69Hoy a las 13:11
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