ENTRENANDO EL CARISMA

¿Queremos adquirir ese magnetismo que distingue a los líderes? Hagámoslo. Se puede aprender. Es cuestión de actitud, convicción y empatía. El carismático muestra interés por los demás.Y nada de egolatría. Un buen capitán ensalza al equipo, no a sí mismo, y la persona carismática es una especie de capitán. Es un guía al que admiran y siguen los demás.Pero el carisma no es una cuestión meramente profesional. Es una virtud que se puede aplicar a la vida cotidiana. Es una forma de liderazgo. Y el liderazgo es conducta.Para tener carisma no hace falta empuñar la espada o subirse a un púlpito. Lo podemos adquirir todos.

Quienes tienen ese don no son capitidisminuidos, pero tampoco son unos soberbios. La egolatría aniquila el carisma. Ha habido monstruos muy carismáticos: Hitler, por ejemplo. Fue un político bien adiestrado en las artes de la convicción. Hay carismáticos negativos. Lo son los líderes que piensan en sí mismos, en su gloria. Cuando ellos desaparecen, todo se va a pique. Cualidades de las personas carismáticas son una buena oratoria, serenidad, expresividad emocional, sensibilidad social… Las puede adquirir su jefe, su compañero de colegio. Usted.

(Fátima Uribarri)

Tener carisma es genial, no todo el mundo lo tiene. Según se dice en este artículo, hay quien nace con él pero cabe la posibilidad de que se entrene para tenerlo. Se puede cambiar la forma de hablar, de moverse, la voz, la sonrisa y el lenguaje gestual se puede aprender. Para tenerlo hay que destacar, ser valiente, dar ejemplo, ser coherente y generoso. Pero en mi opinión, ser carísmatico hasta cierto punto, porque como se dice después es muy fácil caer en la soberbia y la egolatría. Y el ejemplo de Hitler es de lo más llamativo. Desconfiemos, sobre todo en política, de esos líderes carismáticos que arrastran masas. Solo piensan en ellos, en su gloria. Y tras ellos todo desaparece.

Nada mejor que un buen gestor, alguien que nos represente y se ocupe de facilitarnos las cosas, de solucionar problemas en lugar de crearlos. Pero esto hablando de políticos es casi algo de ciencia ficción. Pero, ojo, el carisma solo gana la atención de las personas. Una vez que tienes su atención, tienes que tener algo que decirles. ¿no?

Las flores de la foto no destacan en un plano individual pero todas juntas sí. Tomemos este ejemlo.

Besos.