HUELE A HORNAZO

Y en el improbable caso de que tuviera yo que hornear hoy un hornazo, dado que a mí Dios me dio solamente el talento de comerlo, pero no de cocinarlo, buscaría una receta de las clásicas y algo ya trasnochadas. Compraría la mejor manteca para engrasar el consenso y el entendimiento. Me haría con el gran embutido de calidad de esta tierra, que viene a ser la clase media, hoy en peligro de extinción. Sumaría inversiones sostenibles en la masa del tejido empresarial, con el pimentón de la digitalización, y no lo dejaría hornear a fuego lento, porque hay prisa, que es lo mismo que decir que hay hambre. Finalmente, cuando el hornazo saliese humeante de la cesta de la merienda y antes de que el clima propio del lunes de aguas rompiese a regar a los comensales, levantaría botella en recuerdo de todos aquellos que hoy ya no pueden comerlo con nosotros. Por todos los que se dejaron la vida en esta lucha a ciegas contra el virus y por todos los que los perdimos y quedamos en la batalla, en la que no se otea todavía un final. Para brindar por que el año que viene podamos volver a comer un hornazo sin mascarilla y por las lecciones que, a base de prueba y error, hemos aprendido gracias a la pandemia. 

(Rosalía Sánchez)

Como todos los años, tal día como hoy traigo el recuerdo de la tradición salmantina por excelencia que es la del Lunes de Aguas. Este día se sale al campo a merendar el famoso Hornazo si el tiempo lo permite. Este año sí lo ha permitido pero con las restricciones de grupos de solo cuatro personas. De hecho la policía ya ha tenido que desalojar la zona del Puente Romano donde muchos jovenzuelos estaban haciendo botellones todos bien juntitos.  Y ese consejo para quienes se lo coman en sus casas. Si sólo lo tomamos los dos convivientes se acabó el problema.

Tras la receta simbólica de Rosalía, aquí tenéis la más prosaica del Hormazo: Lomo, chorizo, jamón y huevo duro opcional dentro de una empanada. Acompañado de una rica y fresquita ensalada para que haga de contrapunto a un plato tan "ligero". Hoy Salamanca huele a Hornazo.

Besos.