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El novelista, en mangas de camisa, metió en la máquina de escribir una hoja de papel, la numeró, y se dispuso a relatar un abordaje de piratas. No conocía el mar y sin embargo iba a pintar los mares del sur, turbulentos y misteriosos; no había tratado en su vida más que a empleados sin prestigio romántico y a vecinos pacíficos y oscuros, pero tenía que decir ahora cómo son los piratas; oía gorjear a los jilgueros de su mujer, y poblaba en esos instantes de albatros y grandes aves marinas los cielos sombríos y empavorecedores.
La lucha que sostenía con editores rapaces y con un público indiferente se le antojó el abordaje; la miseria que amenazaba su hogar, el mar bravío. Y al describir las olas en que se mecían cadáveres y mástiles rotos, el mísero escritor pensó en su vida sin triunfo, gobernada por fuerzas sordas y fatales, y a pesar de todo fascinante, mágica, sobrenatural.
(Julio Torri)
El mundo de la literaura es fascinante. El escritor se enfrenta cada día al misterio de la hoja en blanco, ahora sustituida por la pantalla del ordenador. Y a no ser que tenga absolutamente claro lo que va a plasmar en palabras, empieza una dura batalla ente lo que quiere decir y cómo lo dice. Es cierto, que muchas veces lo que se relata tiene que ver con lo que rodea al narrador, que hay una parte autobiográfica en sus líneas, pero no siempre es así: hay quien escribe precisamente lo contrario de lo que supone su vida cotidiana, como válvula de escape o como modo de ganarse la vida. Algo así le ocurre al protagonista de este microcuento: un hombre gris con una vida tirando a miserable que se embarca en una fantástica novela de piratas, sin conocer el mar ni las aves marinas, pero fue precisamente su vida anodina y su lucha diaria por la vida. lo que le ayudó a hacerlo.
Ya lo dijo Eleanor Roosevelt: Debes hacer las cosas que crees que no puedes hacer. Y para eso está la inspiración que no tiene que ser reflejo de nuestra vida, como el que se ve de este puente en el agua no precisamente cristalina.
Besos.
Es que la tarea del novelista no es nada fácil, a no ser que escriba una obra autobiográfica. Y es inevitable que acabe mezclando la fantasía con la realidad.
Bona nit .
Mira que me gustan estas fotos de puentes con un rio abajo y esos maravillosos reflejos que normalmente hay .Preciosa la foto.
Me encanta leer , ya lo sabes y siempre he pensado lo complicado que tiene que ser tener una hoja de papel delante y empezar a contar una historia , ya la tengas "pensada" o no.
Bueno más que complicado contar una historia , lo dificil y lo que yo me quito el sombrero , es contar esa historia de tal manera que el que está leyendo se "traslade" a ese lugar y viva,llore y se emocione con el relato.
Muchos igual dicen o diran que cuaquier libro que se le , pasa y no es verdad .
Ahi está el talento de la escritora o escritor .
Yo te podría decir una ...pero vaya , ya sabes ,tu mejor que nadie ,quien és.
Este día 25 te vá a resultar duro.Más que otros .Pero por quien tu sabes sobre todo,estoy seguro que no te vendrás abajo.Esa carita ...
Buenas noches .
Un beso.
Pues al no jugar nada tampoco me ha tocado nada
saluds
Sin duda que eso de escribir una novela es todo un desafío. Supongo que hay técnicas que ayudan a los escritores, pero también es necesario talento literario. Yo nunca pasé de escribir algún cuento de escaso valor.
En la lotería nada de nada. Ni una pedrea, ni siquiera un reintegro.
Besos.
corremundosHace una hora
eliocroca2Ayer a las 22:04
Joaki-007Ayer a las 18:56
angela.69Ayer a las 16:09
gkane05/12/2024