Tal vez sean 20 minutos en coche, o 600 kilómetros en tren o incluso 3.000 en avión... Sea cual sea la distancia que separe durante el confinamiento a una pareja que no comparte el mismo hogar, la respuesta es la misma: llevan más de un mes sin estar juntos y aún no saben cuándo volverán a estarlo. Es probable que para unos esté siendo más duro, largo o difícil que para otros, pero lo que parece claro es que este tipo de situación tan desconocida puede ser un buen momento para descubrir el lado oscuro o el lado luminoso que predomina en la relación.
Para algunas parejas puede suceder que esta situación sea una especie de «prueba de fuego» que desvele o que traiga a la luz algunos aspectos que estaban ocultos. Estas situaciones pueden llegar a poner de relieve algunos temas de la relación que estaban «de fondo» y que tal vez pasaban desapercibidos en el día a día. En unos casos pueden tener que ver con las sombras de esa pareja y con todo aquello les irá distanciando inexorablemente y en otros, con un lado luminoso que quizá aún no habían descubierto y que les puede llevar a afianzar aún más su unión. Pero al mismo tiempo tendrán que vivir la relación en el momento presente, aunque su pareja no esté físicamente con ellos. No siempre es necesario ver físicamente a alguien para sentir que lo tenemos cerca.
(Raquel Alcolea)
Después de casi 50 días de encierro todo acaba pasando factura emocionalemente. Los niños se aburren y hay que enttretenerlos; parejas que viven solos ponen a prueba su capacidad de convivencia sobre todo aquellas que no llevan muchos años juntos; otros pasan el confinamiento en soledad, porque son personas que viven solas y se adaptan mejor o peor a quedarse en casa. Pero hay otros casos, como se dice en el texto, de parejas a quienes la pandemia ha pillado separaados y llevan su relación lo mejor que pueden a distancia.
Pues hay que hacer de la necesidad virtud y seguro que si la relación es sólida acabarán descubriendo al otro de diferente manera, a unos los distanciará y a otros los unirá más: luces y sombras. Y es una gran verdad que no siempre es necesario tener al lado al ser amado para sentir que lo tenemos cerca.
La relación puede ser como un árbol de troco recio, maduro y rodeado de flores que lo embellecen, como este rinconcito del Parque de Maria Luisa.
Besos.
Poquito a poco parece ser que nos dejan salir a la calle...pero vamos,somos asi de idiotas que lo haremos todo y todos a la vez. Hay mucha gente irresponsable.
Espero que tengas un buen fin de semana
Todo este asunto del confinamiento está siendo una prueba de fuego para todo y para todos. En mi caso no ha cambiado en nada una solidez de pareja que lleva asentada desde hace treinta y cinco años largos, pero sí me ha creado una sensación de falta de libertad que, a mis años, creía absolutamente superada. En ningún momento la casa se me ha caído encima; sin embargo, llevo muy mal que me permitan algo tan inherente al ser humano como entrar o salir sólo a determinadas horas y bajo estrictas condiciones.
Buenas noches .
Precioso rinconcito del Parque de Maria Luisa.
Este encierro desde luego para muchos habrá sido malo y para otros bueno.
Yo de verdad no lo he notado para nada , ya hace años que estamos juntos las 24 horas y no hay problema de pareja ni mucho menos .
Lo que si hay problema es que esto de no poder salir cuando uno quiere y donde quiere , es duro.
Ya veremos mañana que pasa ..presiento que cada uno hara lo que quiera , como si lo viera .
En fin ..veremos lo que pasa .
Un beso.
No tengo el problema que me separen de pareja ninguna pero sí de amigos o de incluso alguno especial jaja... Pero mira, una compañera de trabajo, vive en Tomares y su pareja en Coria, así que no se ven. Pero quedan para verse, aunque sin acercarse. Que yo sinceramente no sé qué es peor. Porque verse a lo lejos sin poder siquiera darse un abrazo... es como poner un caramelo en la puerta del colegio y no permitirle al niño cogerlo. No sé... qué rabia...
Mis padres ya han salido esta mañana tempranito para andar... a ver qué tal se da la cosa. Yo con mis horarios del trabajo lo tengo difícil, con tanta limitación... Lo único que se me ocurre, son los días que estoy de día, si no vuelvo muy tarde, antes de entrar en casa (voy con ropa deportiva y cómoda) hacer algún caminito aunque sea tres cuartos de hora. Pero con el cansancio que llego... ya veré... y si estoy de noche, si llego muy tarde como que temprano no me voy a levantar, así que a ver...
¡Por fin! Te he dejado comentarios desde el día 28 de abril hasta hoy. Esta semana que viene tengo el trabajo por el día, así que me resulta más difícil visitar... pero bueno...
Yo de quien más me acuerdo es de las personas mayores... Son los que peor lo pasan, sin poder ver a nadie y con la incertitud de no saber si podrán ver al alguien pronto.
Lo que está claro es que no estábamos preparados para esto y no siempre se lleva bien.
¿Ya has dado algún paseo?
Besos.
NaiaraDelkoHace 20 minutos
eliocroca2Hace una hora
angela.69Hoy a las 19:44
Joaki-007Hoy a las 17:58
mandarina1981Hoy a las 10:07
