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Palpitaciones, bloqueo mental, temblores… son muchos y muy variados los efectos que el miedo provoca en nuestro cuerpo, tanto a nivel físico como a nivel psicológico. Tal es así que influye en nuestra forma de reaccionar ante las distintas situaciones que se nos presentan. ¿Dónde nacen realmente nuestros miedos? Todos los animales reaccionan ante situaciones de peligro y el ser humano no podía ser menos. El miedo nos ha protegido durante siglos de nuestros depredadores, estamos diseñados para tener miedo de ciertas cosas. Nacemos condicionados genéticamente a realizar determinados comportamientos adaptativos que han sido ‘inoculados’ por nuestros antepasados durante millones de años.
El miedo nos pone en alerta y nos impulsa a tomar decisiones en situaciones extremas. A partir de ahí, la mente entra en el juego y tomamos decisiones. Uno de los primeros órganos en ser avisados es el corazón que latirá con mayor rapidez para enviar más oxígeno a través de la sangre que aumenta su capacidad de coagularse por si se produjera alguna herida y los circuitos sanguíneos se reactivan y fluyen con mayor velocidad especialmente hacia las extremidades para prepararnos para la huida y hacia el cerebro, para mejorar la toma de decisiones y pensar con mayor rapidez. El objetivo es prepararnos para lo que va a suceder, pelear o huir.
(Silvia González)
Cada día estoy más convencida de que somos pura química. Y las situaciones exteriores nos hacen segregar hormonas que nos avisan de que algo no va bien. Como la sensación de miedo que se ve reflejada en el corazón, en las palpitaciones, e incluso en el oxígeno que recibe la sangre, que se pone en alerta por si ocurriera algo después.
O sea, que sentir miedo es bueno, nos avisa y nos hace reaccionar de una manera o de otra. Todos en algún momento lo sentimos ante una situación extrema o de incertidumbre, ante peligros o accidentes posibles. El que diga que no siente miedo miente, y no por eso se es más valiente. Se es valiente si teniendo miedo lo afrontas y te sobrepones a él.
Sólo la inconsciencia ante algo nos libra del miedo. El desconocimiento o la inocencia como puede ser el caso de los niños. No hay que asustarlos pero sí que sean poco a poco conscientes del peligro. No es el caso de los juegos del parque, pero aun así...
Besos.
Sí, el miedo es muy humano, incluso inevitable y necesario, así que hay que avergonzarse de sentirlo, sino, como muy bien dice Maravillas, de no ser capaces de superarlo cuando llega el momento. Y me refiero al verdadero miedo, esa sensación que se encuentra a medio camino entre la inquietud y el pánico.
Buenas noches .
Pues a mi me ha entrado el miedo asi de pronto ya que te estaba escribiendo y de pronto se ha borrado todo.
Pues que bien .
Decia que el miedo es importante tenerlo pues nos avisa de un posible peligro , aunque no siempre el tener miedo es sinónimo de peligro,claro.
Yo por ejemplo ayer , metido en aquella "jaula" , casi pasé miedo y de todas formas ya sabia que no habia peligro.Es un poco psicologico.
Tu estas en tu casa ,con tu pareja , cerrais todas las luces de la casa y uno se esconde en un cuerto...sin decir donde .Seguro que pasas "miedo" cada vez que abras una puerta ...vaya ...yo lo pasaria , seguro.
Besos y bona nit .
Por ejemplo no dá miedo ni nada ese niño volando...
Habia hace mucho un programa de TV en Antena 3 que se llamaba así
El miedo está bien sentirlo como todo en esta vida, en su justa medida. Un miedo extremo que te bloquee y te impida reaccionar no es nada aconsejable. Sin embargo un miedo que te alerta y te pone en guardia puede ser muy conveniente y provechoso.
A mí algo que me paraliza mucho es el vértigo. Es una sensación bastante desagradable, y me pone tan alerta que ni me acerco ni me subo a donde sea porque sé que voy a pasar un mal rato y sinceramente tampoco veo la necesidad, al menos por ahora, claro.
eliocroca2Ayer a las 22:10
Joaki-007Ayer a las 19:08
AMeigaAyer a las 18:21
angela.70Ayer a las 15:28
mebarak1981Ayer a las 12:18