Decir que el coronavirus «va a cambiar la forma en la que vivimos» puede sonar desmesurado, pues nos cuesta concebir un cambio de nuestra «normalidad» tan repentino. Pero, si algo hemos visto durante los abultados días que hemos pasados confinados en nuestra casa, es que nos encontramos ante un momento extraordinario que casi sale de nuestra comprensión.
A partir de ahora, va a reescribirse el código social que conocemos. Nosotros, una sociedad que apoya sus muestras de afecto en el plano más físico –nos abrazamos, besamos y tocamos constantemente– vamos a tener que aprender a demostrar cómo nos sentimos de otra manera. Nosotros, como sociedad, trasladamos el cariño a través del contacto físico y de manera muy común nos relacionamos en grupos numerosos y contemplamos espacios de festividad. Ahora esperamos una «nueva fórmula» que cree el patrón de la nueva «significación afectiva»: vamos a tener que darle un nuevo concepto a los abrazos o las celebraciones. Nuestro código afectivo va a tener que modificarse; vamos a enfocarnos a lo verbal más y al contacto físico menos. Este tiempo nos ha ayudado a valorar las personas que están ahí y las que no, incluso para plantearse si algunas son tan relevantes en nuestras vidas.
(Patricia Gutiérrez)
Pues si lo dicen los psicólogos tendrá que ser así, pero en mi opinión es un cambio a peor, nos despersonalizamos y todo se vuelve más frío. Hay personas que son capaces de verbalizar perfectamente los sentimientos y otras no tanto. Habrá que confiar en que esto sea algo transitorio y podamos volver a la normalidad no a esa "nueva normalidad" de la que nos hablan los políticos y que yo rechazo de plano porque indica que nada volverá a ser normal tal y como lo era para nosotros.
Dicen que el ser humano se acostumbra a todo y que hay que hacer de la necesidad virtud. Los tremendos cambios y adaptaciones que estamos padeciendo ahora en la docencia y que suponen un esfuerzo brutal no creo que, si todo esto pasa, se queden ahí. Al menos una parte de todo lo que estamos aprendiendo (a la fuerza) seguirá estando presente porque será una inversión que se tendrá que amortizar.
De momento a esperar que las calles se animen, que los negocios puedan volver a abrir pronto porque su situación es dramática. ¡Qué pena ver todo tan vacío en una céntrica calle antes tan animada!
Besos.
Yo me resisto a creer que haya que aprender nuevas fórmulas de relación, porque epidemias ha habido siempre, y el ser humano las ha superado sin tener que replantearse su vida casi desde cero. ¿Es que de ésta no vamos a salir, o es que van a venir muchas más, en batallón, año tras año?
Buenas noches .
Pues si , es esta situación que hace tiempo comentamos.Todo ha cambiado y yo estoy seguro que , no es que cambiará mucho mas , pero nos tendremos que acostumbrar a vivir de otro modo...
Colas que antes casi ni haciamos ,todo el mundo con mascarillas , mesas separadas , tendremos "miedo" de tocar a la gente ..en fin, yo creo que nos va a costar mucho volver a la normalidda que antes teniamos .
Nosotros tampoco pasamos a la fase 0 , pero nos dan un pequeño respiro.Se podrá ire a las tiendas sin cita previa ,por ejemplo, y abrir tiendas pequeñas,Algo es algo...
En fin ..nos toca mucha paciencia , eso desde luego.
Un beso.
Sinceramente lo del contacto físico no es algo que yo practique mucho a la hora de mostrar mi afecto, así que no es algo que vaya a echar especialmente de menos porque yo ya soy así de siempre xD
Pero en fin, tampoco niego un abracito o un apretoncillo de mano de vez en cuando.
Pero vaya, no podrás mostrar ese afecto con gente de la calle, pero con familia y demás, no creo que haya problema porque más o menos son gente con la que se convive. ¿Y la pareja? Es que es absurdo.
Joaki-007Hoy a las 07:19
NaiaraDelkoAyer a las 23:31
astur_82Ayer a las 23:22
eliocroca2Ayer a las 22:13
Ayer a las 16:47
