var isMobileBrowser=false;
Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios y mostrarle publicidad relacionada con sus preferencias mediante el análisis de sus hábitos de navegación.
Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Puede obtener más información, o bien conocer cómo cambiar la configuración, en nuestra Política de cookies
El Alma Viviente
Espíritu Vivifiacante
Si sólo les preocupa salvar su vida, la van a perder. Pero si deciden dar su vida por mi causa, entonces se salvarán.
El Antiguo Testamento nos enseña que el alma duerme. En Génesis leemos acerca de la creación de Adán. Cuando Dios le dio vida, éste fue “un ser viviente”.
Génesis 2:7: | Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente. |
En otros pasajes de la Escritura se utiliza la misma expresión, “ser viviente”, aun cuando se hace referencia exclusivamente a los animales y no a los seres humanos (Génesis 9:12; Levítico 11:46).
Dios le dijo a Adán y a Eva que si le desobedecían, ciertamente morirían (Génesis 2:17; 3:2-3). Dios también le dijo a Adán que él había sido tomado del polvo de la tierra y que volvería a ella (Génesis 3:19).
En el Antiguo Testamento, la voz hebrea nefesh se utiliza para referirse al hombre en más de 130 ocasiones. También se usa para referirse a las criaturas del mar
El alma animal: Nefesh.
Es lo que conocemos habitualmente como el cuerpo, pero es el cuerpo cuando se encuentra vivo sin Cristo, ya que el concepto de cuerpo inanimado sin el aliento de Dios solo existe en su propio sueño.Este nivel de consciencia animal se encuentra dentro de la dimensión de la Acción del alma viviente, que es el universo más denso en la materialidad. El movimiento de este nivel del alma se encuentra en el aparato gastrointestinal y genital instintivo de todo ser viviente.
(Génesis 1:20-21), a las aves (v.30) y a los animales en general, incluido el ganado y los que se arrastran, como los reptiles (v.24).
Por lo tanto, si decimos que el hombre es un alma inmortal que habita temporalmente un cuerpo físico, tendremos que decir lo mismo acerca de la naturaleza animal, porque en la Biblia se utiliza el mismo término para referirse tanto al uno como a los otros. Sin embargo, ningún estudio serio haría semejante pronunciamiento acerca de los animales. La verdad es que el término nefesh, que en algunos pasajes se traduce por “alma”, se aplica a cualquier ser viviente (ya sea hombre o animal), y no a alguna esencia viva e independiente que habita el cuerpo y nos da a comprender la naturaleza que compartimos con los animales.
Una de las afirmaciones categóricas que hace la Biblia acerca del “alma” es que ésta puede morir. En Ezequiel 18:4 y 18:20 podemos leer claramente que “el alma que pecare, esa morirá”. El contexto de estos versículos nos muestra que el alma se identifica con el ser humano mismo, no con una entidad separada que existe independientemente del huésped físico a la que puede ser puesta la atensión solo a sus propias necesidades.
Las Escrituras nos dicen que los muertos no tienen conciencia: “Los que viven saben que han de morir; pero los muertos nada saben...”. No siguen conscientes en otro estado u otro lugar.
Eclesiastés 9:5: | Porque los que viven saben que han de morir; pero los muertos nada saben, ni tienen más paga; porque su memoria es puesta en olvido. |
Es la importancia de pasar de muerte a vida en cristo conocemos su redencián.El plan universal del pacto de salvación para vida con Dios.
Lucas 1:50: | Y su misericordia es de generación en generación A los que le temen. |
Es atraves de su palabra que opera el Espíritu Vivificante de su hijo amado el Redentor del mundo.
1 Corintios 15:45: | Así también está escrito: Fue hecho el primer hombre Adán alma viviente; el postrer Adán, espíritu vivificante. |