var isMobileBrowser=false;
El Tiempo
En Su Palabra
Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora.
Con el tiempo se aprende que la vida es un recorrido de altas y bajas, que no puede ser solo cosechar sin plantar, hablar sin callar, continuar sin parar.
Eclesiastés 3:2: | Tiempo de nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado; |
Cada momento tiene sus propias satisfacciones y en cada uno de ellos sé que Dios se encuentra presente. Incluso en los peores momentos de nuestra prueba su misericordia nunca nos abandona y puedo con confianza decir que cada demandante situación traera consigo, nuevas experiencias, pero sobretodo nuevas energías que fortaleceran sin dudas nuestro carácter y fe en su poder y amor incondicional.”
Eclesiastés 3:3: | tiempo de matar, y tiempo de curar; tiempo de destruir, y tiempo de edificar; |
Nos quedo claro la lección del testimonio de la vida misma:En su Justicia Gracia y Misericordia en cada temporada de nuestras vidas Dios tendrá para nosotros una experiencia especial.
Eclesiastés 3:4: | tiempo de llorar, y tiempo de reir; tiempo de endechar, y tiempo de bailar; |
En la escasez o en la enfermedad su presencia nos dará aliento, en la abundancia su paz nos dará calma y sabiduría.
Eclesiastés 3:5: | tiempo de esparcir piedras, y tiempo de juntar piedras; tiempo de abrazar, y tiempo de abstenerse de abrazar; |
Todo se resume en disfrutar en El Señor cada temporada. No querer prolongar las buenas, ni transitar en velocidad las malas, sino estar totalmente presentes y listos para recibir en cualquier circunstancia las hermosas bendiciones que El Señor derramará en nuestras vidas, sin importar dónde y cómo nos encontremos.
Eclesiastés 3:6: | tiempo de buscar, y tiempo de perder; tiempo de guardar, y tiempo de desechar; |
No lo olvides, en cada etapa de la vida Dios nos acogerá en su justicia con su amor y misericordia.Confía y mantengamonos vigilantes y preparados en oración constante en Él.
Eclesiastés 3:8: | tiempo de amar, y tiempo de aborrecer; tiempo de guerra, y tiempo de paz. |