var isMobileBrowser=false;
Sobre Abundante
a la congregación de los primogénitos que están inscritos en los cielos, a Dios el Juez de todos, a los espíritus de los justos hechos perfectos,
En estos versículos el apóstol Pablo nos habla de los redimidos que lavaron sus vestiduras con la sangre de Jesús. Los que se acercaron al monte de Sion al Santuario Celestial (Salmos 48:1-2). Pero Pablo también afirma que los redimidos, aquellos cuyos nombres están inscritos en el Libro de la Vida del Cordero (Filipenses 4:3; Apocalipsis 3:5), son los “primogénitos.”
Primogénitos son los hijos que nacen en primer lugar. Por este versículo, se podría malinterpretar que sólo los hijos primogénitos tienen oportunidad de salvarse.
Para poder comprender qué es lo que el apóstol Pablo quiere decir al escribir sobre la “asamblea de los primogénitos” y para entender la primogenitura en el Nuevo Pacto, debemos entender primero la primogenitura antes del monte de Sion.
Génesis 25:22: | Y los hijos luchaban dentro de ella; y dijo: Si es así, ¿para qué vivo yo? Y fue a consultar a Jehová; |
“Las promesas hechas a Abraham y confirmadas a su hijo eran miradas por Isaac y Rebeca como la meta suprema de sus deseos y esperanzas.
Génesis 25:23: | y le respondió Jehová: Dos naciones hay en tu seno, Y dos pueblos serán divididos desde tus entrañas; El un pueblo será más fuerte que el otro pueblo, Y el mayor servirá al menor. |
Esaú y Jacob conocían estas promesas. Se les había enseñado a considerar la primogenitura como asunto de gran importancia, porque no solo abarcaba la herencia de las riquezas terrenales, sino también la preeminencia espiritual.
Génesis 25:31: | Y Jacob respondió: Véndeme en este día tu primogenitura. |
El que la recibía debía ser el sacerdote de la familia; y de su linaje descendería el Redentor del mundo. En cambio, también pesaban responsabilidades sobre el poseedor de la primogenitura. El que heredaba sus bendiciones debía dedicar su vida al servicio de Dios. Como Abraham, debía obedecer los requerimientos del pacto contemporaneo de la epoca. En el matrimonio, en las relaciones de familia y en la vida pública, debía consultar la voluntad de Dios.”
Esaú y Jacob eran mellizos, nacieron uno tras otro. Pero Esaú nació primero, por lo tanto era el primogénito de Isaac y Rebeca.
La relación entre Jacob es un tema recurrente a lo largo de toda la ley de Dios. Sin embargo, la Palabra nos cuenta sólo de dos encuentros cara a cara entre los hermanos. El primer encuentro la famosa escena que describe la venta de la primogenitura de Esaú por un guiso de lentejas menospreciando las bendiciones de su Padre.
Esaú explica la filosofía de vida que lo motivó a llevar a cabo la venta: “He aquí que de todas formas moriré, entonces, ¿de que me sirve la primogenitura?”.
A primera vista, esta parece ser una razón muy extraña como para menospreciar sus derechos como primogénito, ya que dichos derechos le significaban obtener una mayor porción de los bienes de su padre según establecen las leyes de herencia de la Palabra. Dada esta aparente dificultad,en la comprensión de una dimensión natural no le permitio integral la bendición de su Padre que continuaba una vida mas de su propia naturaleza .
Génesis 25:32: | Entonces dijo Esaú: He aquí yo me voy a morir; ¿para qué, pues, me servirá la primogenitura? |