var isMobileBrowser=false;
Que el camino salga a tu encuentro.
Que el viento siempre esté detrás de ti
Y la lluvia caiga suave sobre tus campos.
Y hasta que nos volvamos a encontrar, que Dios te sostenga con el puño de su mano.
Que vivas por el tiempo que tú quieras y que nunca quieras vivir tanto como vives.