Aparece en algunos recuerdos junto a Abel, Caín y Seth, es un experimento al igual que ellos y la encargada de guiarlos durante su viaje a Marte donde a diferencia de ellos ya era adulta. Es la mentora de los otros tres crusnik, siendo considerada por ellos casi como una madre.
Su aspecto es el de una joven hindú pelirroja, muy amable y pacífica, muy parecida a Esther excepto por el color de su piel. Originalmente portaba un rosario de metal con una cruz adornada con crestas y alas de murciélagos, la cual pasaría a poder de Abel tras su muerte. Durante toda su vida intentó hacer entender a Abel que los humanos normales no eran sus enemigos, sin embargo, no lo logró gracias al fuerte resentimiento que el muchacho guardaba contra ellos.
Tras ser infectados y volver a la Tierra se desató la guerra entre los recién llegados y los humanos normales, poniéndose ella de parte de los últimos y enfrentándose al resto de los crusnik, sin perder la esperanza de devolverlos al camino correcto, desgraciadamente fue decapitada por Caín cuando este activó el 100% del poder de sus nanomáquinas. Ante tal acto, Abel se arrepintió de su actuar y se retiró a Roma, donde colocó sus restos en un sepulcro que resguardó por nueve siglos hasta unirse a la agencia AX.
Las nanomáquinas en su sangre parecen poseer cualidades curativas para los Kresnik, ya que cuando Abel fue asesinado por Caín, Catherina envió a Tres con una muestra para inyectarla en su cadáver, lo que le devolvió la vida.
