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Empiezas creyendo a una persona, pensando que no era coincidencia haberos conocido y te das cuenta a lo largo del tiempo que solo ha estado jugando contigo. Que no le importaba tu amistad ni siquiera la más mínima sonrisa vivida juntas. Parece que la falsedad en las personas está de moda, cuando cofias ciegamente en alguien te das cuenta que no es lo que parece. La verdad es que me dan pena esas personas porque no son capaces de afrontar su propia vida, de vivir con su propia realidad y se inventan otra distinta solo para jodernos a los demás.