Personitas

Confundimos las victorias con el éxito. Liga 2015/16, segunda fase: ganamos los doce partidos jugados y ahí comenzó el principio de nuestro hundimiento. Nos creímos lo que no éramos, nos volvimos cómodos y, peor aún, algo creídos. Después llegó la realidad sin avisar, como tiene por costumbre, todo fue derrota tras derrota cuando la cigarra (nosotros) se enfrentaba a hormigas que volaban en el campo. El club culminó nuestra bajada a los infiernos llevándose a los alumnos más aplicados, por talento o porque fueron capaces de abstraerse de la realidad tergiversada por un entrenador vendedor de humo con la cabeza enterrada en estadísticas para huir de su incompetencia. Este sábado perdimos y por paliza y sin embargo salimos del campo alegres, tanto que prolongamos el juego en las canchas de fuera mientras algunos de nosotros hacían que merendaban. Y es posible perder y por paliza y al mismo tiempo sentirse satisfecho con uno mismo porque peleamos, jugamos con criterio, ignorando el resultado hasta donde puede un niño de ocho años para que no afectara a nuestra moral y en consecuencia en el ánimo de hacerlo lo mejor posible. Nos quedan dos partidos y sabemos de antemano que apenas tenemos posibilidades de ni siquiera sacar un empate. No juzgaremos el éxito por los triunfos. Nuestro objetivo será sentirnos personitas orgullosas de seguir creciendo.

28/01/2017