EL GRITO:

El grito del delirio clama venganza
Y busca en el sufrimiento el tiempo que ama.
Distancia en frágil ausencia
Frente a la necesidad urge el mapa
Que se explica y nos justifica,

El vals de las arterias cubrirá los cielos del alma
Que van fraguando el calor tibio del poema,

Pude sentir tu cielo en la noche prohibida
Como el dolor que llevo en mis ojos
Un brillo que me libra del odio,

Amada, existe el lenguaje como único testigo
Y es libre su hermosa locura
Y consuela nuestro único silencio,

Amor, el velo de los secretos consumió las fantasías
Que abren los ventanales de tus cielos
En los conductos del alma vas desahogando sentimientos,

Somos testigos de la locura que consuela el arte del silencio,

Lagrimas sobre el tiempo como tempestades que abrigan
En calma despiertan el calor ardiente de tus olas,

Amor, eres la estela ociosa en fuego cautivado
Viviendo en un corazón que ama,

Hay amor, imagine tu sonrisa navegando en el viento fresco.
Tus labios a la deriva despiertan húmedos suspiros
Y se clavan en mi alma como el perfume y el oro,

Tus noches son baladas en el aliento de tus torbellinos.
Alba de arco iris bañada en zafiros que fraguan mis fantasías,

Esta es la frontera del alma en su nupcial grito
Dando de beber su delicado sentimiento,
Y es destino cierto en la cordura que sabe amar.

Como viven con dolor los desheredados
Con la negra espada del silencio
Que atrapa su significado,
Y revoluciona el alma en el santuario poetico,

El tiempo vive su verdad y repite el eco de la vida
Con labios y sonrisas de felicidad
Porque somos identidad misericordiosa,

Amada, soy esclavo de tus silencios
Y vivo bajo la pleitesía de tus sueños,
Que auguran gritos en vivos deseos,
YEXHUA: el echo de un grito calma el sabor
Que renueva el nervioso deseo del cuerpo,