Llega un momento, en el que el abuso de confianza es extremo y la gente te toma por gilipollas.
Llega un momento, en el quela confianza es tan extrema (aún sabiendo que no deberías tenerla) que las cosas no piensas que puedan ir mal.

En efecto, ya lo dicen, la confianza da asco.
Puede que yo no haya hecho lo correcto, y sé que yo no soy nadie para "castigar" a nadie, pero sí digo que una persona se siente bien al hacer este tipo de cosas. Seguramente, me toparé con alguien igual que yo, y seguramente, que le odiaré profundamente, pero eso forma parte de mis cosas, de lo que yo vaya ha hacer, de mi vida. Nadie más la va a vivir, sólo yo, los demás, como mucho, tendrán en su vida recuerdos de cosas pasadas conmigo, pero me da igual.

Seguramente, que para la otra persona, la persona malvada, perversa y egoísta, soy yo, pero eso es algo que suele pasar "la culpa es del otro" siempre se dice. También es normal sólo recordar las cosas que nosotros hacemos por los demás, y no lo que los demás hacen por nosotros. Pero aún dejando de lado todo eso.... dime, ¿alguna vez cuando te he necesitado has estado a mi lado? sí, sí que lo has estado, pero sólo para escucharme para luego irte a buscar a alguien y decir todo lo que he dicho. Eso sin contar todas las veces que has tratado mis cosas como un problema banal, o incluso, a las que yo no le daba importancia (porque no quería que realmente la tuviesen) tú les has dado toda la importancia posible.
Siempre intentando enterarte de todo para reírte.
Todavía me acuerdo de cómo te reíste al enterarte de cómo murió la madre de una pobre chica.
Y todavía recuerdo cómo una vez casi una me pega por tu culpa.