Hoy siento nostalgia. De atravesar ese puente todos los días, que me conectaba con mi barrio, con mis vecinos, con mi gente. Nostalgia de cruzarme con un nazareno, que de rouán o de capa, se dirigía hacia la gloria de realizar su estación de penitencia. Nostalgia de oler el azahar mezclado con incienso por cada una de tus callejuelas que desembocaban a la Giralda. Nostalgia de ver un palio desaparecer por una esquina. De esperar al Señor de Madrugada en su plaza del Salvador. Nostalgia de los calentitos. De las torrijas. Nostalgia de cirios derramando su cera y de cruces de penitentes. De pies descalzos y rosarios en mano. De escuchar "la Madrugá" en el Arco del Postigo...
Pero pronto esa nostalgia se convertirá en alegría, porque de nuevo nos veremos en la vorágine de preparativos que nos acercan a esa Semana tan ansiada por todos.
Sevilla, ya queda menos para fundirnos de nuevo. Y como ese nazareno de la Estrella, cruzar de nuevo el puente que me lleve a mi barrio: Triana.
ola ke tal
buena foto del puente de triana
con ese nazareno cruzandolo
y un buen escrito tanto sentimiento escrito en essas frases
xao k tengas un buen fin de semana
y ke estes pasando un buen dia
saludos y besos
ah k eres de sevilla
Es de Málaga pero le pasa como a mi que tenemos alma sevillana
