En el primer acto, Fukaya vive un dilema, ya que la personalidad de Fujino no es lo único que la hace “extraña”, si no que esta chica no puede vivir sin sexo, es una ninfómana y pervertidilla, quien en todo momento carga consigo vibradores y los usa en los lugares mas impensables, como el transporte público o la escuela. Fujino se relaciona con Fukaya y lo acepta como novio despues de que Fukaya la veía distanciadamente cada dia rumbo a la escuela, a la misma hora en el mismo tren, sin embargo, Fujino no puede dejar de lado su obseción a los vibradores, llegando al punto en que Fukaya cree que ella ve en él una herramienta o un juguete mas, cree que él solo no la satisface por lo que busca la ayuda de su única confidente, la Enfermera de la escuela. Para Fukaya, lo importante es hacer que Fujino vea en él a un hombre que puede complacerla y no sentirse al nivel de un simple juguete como los vibradores.
En eso, se aparece una chica estudiante de la misma escuela. Ella es una conocida de la infancia de Fukaya y su nombre es Mita, de cabellera larga y negra y usa anteojos. Esta chica siempre se ha pasado molestando y abusando “tiernamente” de Fukaya desde que eran niños, acosándolo y haciéndole maldades. Mita posee facultades para la química, las que aprovecha para crear brebajes afrodisiacos y hacer que Fukaya caiga a sus pies. Al enterarse de la relación de Fukaya con Fujino, decide experimentar con ellos su mas nuevo brebaje, un afrodisiaco muy fuerte para Fukaya, y decide dárselo a Fujino, porque si Fukaya sabe que el brebaje es de parte de Mita, ni loco se lo bebería. Fujino no debe beber por ningún motivo el brebaje pues siendo un afrodisiaco, resultaría en algo muy extremo para ella en su calidad de ninfómana que no necesita de nada para excitarse. Pero Fujino bebe el brebaje pensando en que pudiera hacerle daño a Fukaya, y como resultado se sale de control, se excita extremadamente y sólo Fukaya puede ayudarla a “desahogarse”, y esto resulta muy interesante p