También conocido como "Callaquén" o "La Blanca" (denominación de arrieros y baqueanos del sector), este volcán activo, con fumarolas permanentes en el lado este de su cumbre, se ubica en el Alto Biobío, dando nacimiento desde sus abundantes glaciares a los ríos Pangue, Malla y Ralco, todos tributarios del Biobío.
Pese a carecer de un típico cráter volcánico, es posible ver fumarolas en su costado oriental, justo sobre el glaciar que da orígen al río Malla. Sin embargo, no se registran erupciones, salvo una leve reactivación de sus fumarolas en 1992, año en que se produjo uno de los últimos procesos eruptivos de su vecino volcán Copahue. La cumbre del Callaqui, escasamente conocida y asimismo poco visitada, constituye una amplia planicie en donde es difícil distinguir el punto más alto. Probablemente es este desconocimiento el responsable de su ausencia en registros de ascenso y del significado de su nombre.
No obstante, su figura se vislumbra claramente desde el valle central, inmediatamente al sur de la Sierra Velluda, por su forma alargada de norte a sur. En sus laderas existen abundantes bosques de araucaria, raulí, roble, coigüe y lenga y se encuentra también la Reserva Nacional Ralco, con atractivos cercanos como son las lagunas del Barco y La Mula.
