Esto todavía no tiene ni forma porque no estoy seguro de cual darle. Mejor, creo que la forma la irá cogiendo poco a poco. Así lo mismo un día puedo hablarte de política que de cómo me fue el día que de fotografía... bueno, de fotografía mejor no hablo mucho no sea que la cague al lado de otros tantos que saben más que yo y ya hablan por aquí y por allí.

Y no, no te voy a hacer la historia de mi vida ni de cómo vine a dar aquí desde allá, sencillamente porque no quiero aburrirte, y porque no me da la gana! Pero sí estaba pensando hoy que hablé... chateé con mi familia (chatear... ¿siquiera existe esa palabra en español?) Ellos están en Cuba y yo aquí casi en Canadá así que sí, no te extrañes, es un lujo chatear, no por la lejanía, sino porque ellos están en Cuba. Esa pequelita islita aislada no sólo por el agua, sino por el odio...

Y nada hoy consiguieron un par de horas de una conexion pirata, de esas que no son de internet pero sí de los messengers y pudimos quasi-conversar un rato. Es extraño, la lejanía te va recomiendo las entrañas, sacando lo peor de tí para poder seguir adelante, para sobreponerte a la distancia y seguir tu camino, y buscas a quien culpar y por supuesto que no va a ser ni a tí ni a tu familia, NO! juzgas al gobierno... ¿Y a quien si no? ese que me obligó a salir de mi país porque se erigió dueño y señor del suelo y de todo lo demás hablando en "nuestro" nombre pero sin decir lo que "nosotros" queremos?

Lo que sí me queda claro es que la Revolución murió, pero no ahora ni hace poco, la revolución murió hace muchos, muchísimos años cuando aún era joven. Es que ya su propia palabra lo dice, hubo una revolución, una vuelta completa y después se estancó... y ya eso no es revolución, es estancamiento... y qué pasa con el agua estancada? Se empantana, se pudre, huele mal y no sirve.

Y basta por hoy que empecé feliz. Ahora a tomar algunas fotos para mañana!