Inocentes

Con la celebración el día 28 de Diciembre de los Santos Inocentes, hemos de volver nuestros ojos a la infancia, a esos niños que son víctimas de la sinrazón de los adultos. Niños esclavos, niños hambrientos, niños maltratados, niños soldados, niños prostituidos, niños abandonados, niños que emigran en las más duras condiciones..... Niños inocentes que viven su infierno en la Tierra.

Justamente en estas fechas se cumplen 100 años de una institución que fue santo y seña en Cartagena: La Casa del Niño, cuyo edificio fue inaugurado el 24 de Diciembre de 1918. 

Eran tiempos de muchas necesidades y miserias en España. A instancia del entonces alcalde de Cartagena, Casto Fernández, el rico propietario minero Camilo Aguirre Fernández cedió unos solares sobre los que el reconocido arquitecto Víctor Beltrí levantó el edificio administrado por la Junta Local de Protección de la Infancia y regido por las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl. En un principio estaba destinado a comedor y refugio nocturno para niños abandonados. Posteriormente se habilitaron otros servicios. Así en 1920 se inauguraron los pabellones escolares, con talleres de manualidades y salón de actos. En 1931 se completó el conjunto con la Gota de Leche en la que miles de niños salieron adelante con las raciones que allí recibían.

Ya en el último cuarto del siglo XX, los niños pasaron a depender de Servicios Sociales de la Comunidad Autónoma y el edificio cerró sus puertas. Hoy, en evidente estado de abandono, está a la espera de un proyecto de rehabilitación integral muy demandado por la ciudadanía.

Imagen propia: Fachada de la Casa del Niño de Cartagena en calle Tolosa Lotour.