Noche de Reyes

La noche mágica de Reyes nos acerca a una historia que para los adultos se encuentra entre la realidad y la ficción. No son pocos los entendidos en las Escrituras que lo consideran una encantadora parábola que nos enseña la lección de que para encontrar la verdad debemos realizar un largo viaje con la orientación de “arriba”.

Pero también los hay que afirman su autenticidad histórica. Entre ellos, recientemente leí un artículo del padre Dwight Longenecker es el autor de un estudio titulado "Mystery of the Magi-The Quest to Identify the Three Wise Men" (El misterio de los Magos: la búsqueda para identificar a los Tres Reyes Magos), en el que escribe: "Los Reyes Magos eran diplomáticos del vecino reino de los nabateos. Con su capital en la famosa ciudad de Petra, el rey nabateo Aretas IV tenía toda la motivación de cimentar una alianza con Herodes el Grande. Cuando los magos de su corte discernieron que había nacido un nuevo heredero al trono judío, Aretas los envió como emisarios a la corte de Herodes para rendir homenaje". Pero durante siglos las arenas del desierto sepultaron la cultura nabatea, por lo que la historia de los magos era desconocida.

Naturalmente existen otras muchas hipótesis, pero en cualquier caso la historia de los Reyes Magos es tan auténtica y real como los millones de niños que esta noche sueñan con ellos.

Imagen: La adoración de los magos de Andrea Mantegna (1431-1506). Museo J.Paul Getty de Los Ángeles.