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La Puebla es una diputación rural del municipio de Cartagena, que en estos días está celebrando sus Fiestas de la Patata. En el programa de este año hay veladas troveras, ruta de la tapa, concursos de cocina, actividades infantiles, talleres de cocina, degustaciones, venta directa, exposición de variedades y hasta un concurso de lanzamiento de patata a la olla.
La patata se ha convertido en un elemento básico y fundamental de nuestra cocina y en más de una ocasión nos han salvado de un apuro cuando no disponíamos de mucha opción en nuestra despensa. Sin embargo la patata es una recién llegada a nuestra mesa, porque aunque ya era cultivada en el Altiplano Andino hace unos 7000 años, no fue hasta el siglo XVI cuando los españoles la conocieron. Tras el descubrimiento de América, pronto advirtiron las propiedades alimenticias de este tubérculo, además de la facilidad con la que se podía conservar, lo que posibilitó integrarla en la intendencia de los barcos.
Lo curioso es que en Europa, al principio se la consideró una rareza botánica, que los clérigos cultivaban en macetas y que no siempre se destinaba al consumo. Su planta frondosa y con bonitas flores hizo que fuese un elemento ornamental para los jardines de la época. Sería a finales del siglo XVIII, cuando Antoine Parmentier, agrónomo y naturalista francés, impuso definitivamente en toda Europa la costumbre de usarla como alimento.
El Campo de Cartagena, no es ajeno a su cultivo con más de 3.000 hectáreas dedicadas al mismo. La llamada patata agria es una de las variedades más importantes, conocida por ser temprana y de alta calidad. Otras variedades comunes en nuestra comarca son las Soprano y Lucinda.
No faltan amenazas, como la reducción o supresión del trasvase Tajo-Segura, que patrocina un gobierno español miope. Frente a esto ya se buscan soluciones. Así Susana Zapata, de la Universidad Politécnica de Cartagena, ha estudiado la "Incorporación de nuevas tecnologías para la optimización del uso del agua". En cualquier caso si Vds se acercan este fin de semana por La Puebla de Cartagena, podrán adquirir un saquito de patatas de gran calidad a muy buen precio.
Imagen: Cartel de la Fiesta de la Patata, obra de José Manuel Puebla, prestigioso dibujante de Cartagena, conocido por sus viñetas en periódicos como LA VERDAD o ABC
En cuanto entras en la Plaza Markt, tus pupilas se dilatan y comprendes porqué Brujas está considerada una de las ciudades más bellas de Europa.
Preside la plaza el edificio de Las Halles con la Torre Belfort o Campanario de Brujas. Este edificio gótico constituía el antiguo mercado de los Paños. El Campanario con sus 83 metros de altura es uno de los símbolos de Brujas. Cuenta con un carillón de 47 campanas, que antaño convocaba a los vecinos y que aún suenan los miércoles, sábados y domingo por la mañana. Dicen las guías de turismo que quienes se atreven a subir sus 366 escalones hasta la parte superior, son recompensados con unas impresionantes vistas.
Al norte de la plaza vemos las antiguas casas gremiales medievales, con sus tejados a dos aguas. Frente a la gama monocromática de Gante, las casas gremiales de Brujas llenan la plaza de color y alegría. En sus bajos numerosas cafeterías y cervecerías.
En el lado este observaremos el Palacio de la Provincia o Landhuis, un edificio neogótico que data del XIX, donde antiguamente vivía el gobernador de la provincia, máximo representante del rey en la región. Actualmente, es sede de la oficina de turismo y del museo Historium.
El centro de la plaza lo preside una escultura que recuerda a los héroes Jan Breydel y Pieter De Koninck, dirigentes gremiales que lucharon contra los franceses en 1302 en la llamada Batalla de las Espuelas de Oro, para asegurar la libertad e independencia de Brujas y Flandes.
Antes de dejar Brujas, aún disponemos de un tiempo para sentarnos en una cervecería a paladear alguna de las afamadas cervezas belgas.
Belfort; Torre Campanario de Brujas.
Casas Gremiales de Brujas.
Landhuis. Palacio de la Provincia.
Jan Breydel y Pieter De Koninck, héroes locales de la lucha contra los franceses.
Entramos en el centro político de Brujas, la plaza del Burg, donde se ubica el Ayuntamiento. Una plaza rodeada de la manificencia de sus construcciones de muy variados estilos que se han ido erigiendo a lo largo de más de mil años de historia. Aquí nació la ciudad de Brujas. Fue aquí donde Balduino I, Conde de Flandes, conocido como "Brazo de Hierro", levantó el primer castillo en el siglo IX, con la intencción de detener las invasiones normandas que controlaban el Mar del Norte. Este castillo dio nombre a la plaza, ya que burg no significa otra cosa que castillo.
Este es uno de los lugares donde a lo largo del año se puede disfrutar de festivales de música o actividades de verano y es aquí donde se inicia y tiene fin la procesión de la Santa Sangre, festividad que tiene lugar el día de la Ascensión, que figura en la lista de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO.
El Ayuntamiento de Brujas (Stadhuis) es uno de los ayuntamientos más antiguos de los Países Bajos. Construido entre 1376 y 1421, de estilo gótico flamígero. Destacan las tres torres de su fachada, así como las numerosas esculturas y escudos que cubren la misma. No lo visitamos, pero las guías coinciden en destacar en su interior la Sala Gótica, ricamente decorada donde llama la atención su bóveda de madera suspendida en el aire y murales del siglo XX sobre la historia de Brujas.
Junto al ayuntamiento, el Franconato de Brujas, uno de los edificios más llamativos de la Plaza Burg. Construido en el siglo XVI, por Christian Sixdeniers, siguiendo el proyecto dado por Jan Wallet. Destaca su fachada blanca y dorada con ventanales rojos, siendo un ejemplo de barroco primitivo. Esta antigua Cancillería del Franc, en la actualidad alberga dependencias judiciales.
El Palacio de Justicia, edificio de estilo renacentista, fue construído entre 1722 y 1727. Actualmente alberga el Museo Het Brugse Vrije que contiene los archivos históricos de la ciudad.
Y dejamos para el final una pequeña joya, la Basílica de la Santa Sangre.Lo primero que llama la atención de este templo es su nombre. Hace referencia a una reliquia con sangre de Cristo, que se conserva en un relicario de plata. Según la leyenda, viajó de Tierra Santa a Brujas porque en el siglo XII, Balduino III, rey de Jerusalén, se lo entregó a su cuñado Teodorico de Alsacia, conde de Flandes como recompensa por los grandes servicios prestados.
La Basílica está constituida por dos iglesias superpuestas, siendo la parte inferior la iglesia románica de San Basilio del año 1139, que fue capilla privada de los Condes de Flandes y la superior la basílica gótica de los siglos XV y XVI. De todo el conjunto, destaca su entrada con una fachada, datada entre los años 1529-1534, de marcada influencia italiana, convirtiéndose así en una de los primeros testimonios de este estilo en Flandes.
Disponemos de unos minutos para visitar su interior. El mural tras el altar mayor fue realizado en 1905. En la parte superior, el "Misterio de la cruz" representa a Cristo derramando su sangre. La parte inferior representa el traslado de la reliquia desde Jerusalén a Brujas: a la izquierda, Teodorico de Alsacia recibe la reliquia de Balduino III, rey de Jerusalén; a la derecha, arrodillado al lado de la condesa Sibila de Anjou, entrega la reliquia al capellán.
Apenas a dos minutos de la Plaza del Burg se encuentra la Plaza del Mark, donde llegaremos en nuestra próxima actualización.
Ayuntamiento
Franconato de Brujas
Antiguo Palacio de Justicia
Basílica de la Santa Sangre
Nave de la Basílica
Altar Mayor de la Basílica
Continuamos nuestro recorrido por Brujas, en dirección al centro urbano, donde la Plaza Burg y la Plaza Mark, constituyen el corazón de la ciudad.
Encontramos primeramente el Hospital de San Juan, que data de mediados del siglo XII. Proporcionaba cobijo y cuidados a pobres, enfermos, viajeros y peregrinos por igual. Hoy, las enfermerías medievales, con su iglesia y ático, se han convertido en un Museo Contemporáneo.
Divisamos ahora la catedral de San Salvador, de los siglos XIII y XIV. Es la iglesia más antigua de Brujas. Despúes que en 1799, durante la ocupación francesa, fue destruida la antigua catedral de San Donaciano, se convirtió en la sede de la diócesis de Brujas a principios del siglo XIX. El tiempo medido no nos permite entrar en ella, donde las guías destacan el órgano, las tumbas medievales, los tapices de Bruselas y la rica colección de arte flamenco. El espacio de la antigua Catedral de San Donaciano está ahora ocupado por el Crowne Plaza Brugge Hotel.
Y llegamos ante la Casa Palacio de Gruuthuse, que nos traslada al siglo XV, cuando la familia Gruuthuse, una familia de comerciantes se enriqueció por el comercio del gruut, una mezcla de hierbas que se usa para la fabricación de la cerveza. El Palacio alberga en la actualidad el Museo de la Historia de Brujas.
Y nos sorprende encontrar el busto de un español: Juan Luis Vives, conocido filósofo y humanista valenciano que vivió en Brujas durante 14 años huyendo de la Inquisición española.
Llegamos a uno de los puntos más icónicos de Brujas; el pintoresco puente de piedra de San Bonifacio, de finales del siglo XIII, que salva el Canal de Dijver y se ubica justo al lado de los jardines Arentshof. Es ese lugar donde los visitantes gustan hacerse fotos.
Tras el puente, llegamos a la Iglesia de Nuestra Señora, gótica, levantada entre los siglos XIII y XVI, cuyo perfil domina el paisaje, con una torre de 115 metros, que se dice es la más alta de Bélgica. Aunque no entramos, en su interior se encuentra la Virgen de Brujas es una obra maestra de Miguel Ángel.
A través del Callejón del Asno Ciego nos asomaremos a la Plaza del Burg. Al final del callejón una preciosa bóveda conecta el Ayuntamiento y la Antigua Escribanía civil o Franconato de Brujas.
Pero la Plaza del Burg será materia de nuestra próxima actualización.
Museo del Hospital de San Juan
Fachada de la Catedral del Salvador
Casa Palacio de Gruuthuse
Busto de Juan Luis Vives
Puente de San Bonifacio
Iglesia de Nuestra Señora
Callejón del Asno Ciego
Y llegamos a Brujas. Con una población de 120.000 habitantes en su núcleo urbano, es una de las ciudades medievales mejor conservadas de Europa, con lonjas, casas gremiales, palacios e iglesias, que unido a sus canales, que enlazan con el río Zwyn y serpentean por la ciudad, le confieren una estampa singular y pintoresca.
Nuestro autobús estaciona en Kanaaleiland, muy cerca del puente Barge, que se construyó con ocasión de Brujas Capital Cultural de Europa en 2002 y que es hoy una de las entradas de la ciudad.mAtravesamos el puente y estamos en el Parque Minnewater (Lago del Amor), que en realidad es el antiguo puerto de Brujas, hoy con cisnes y naturaleza en lugar de barcos mercantes.
Vemos la Torre Polvorín, que se integraba en las antiguas murallas de la ciudad. Data del año 1398 y era utilizada para almacenar armamento, pólvora y municiones.
Y llegamos a uno de los lugares de imprescindible visita en Brujas: el Beguinaje o Begijnhof. Hablamos de un beaterio fundado por la Condesa de Flandes en 1245, que forma parte del conjunto de beaterios flamencos declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Rodeado por un muro con foso, esconde un recinto de casitas blancas en torno a un jardín.
Entre los siglos XI y XIII, algunas mujeres comenzaron a unirse para dar respuesta a sus necesidades espirituales y materiales. Así nació el movimiento de las beguinas, mujeres laicas, no sometidas a ninguna regla, que consagraban su vida a la oración y se dedicaban al cuidado de enfermos, a la educación y al tratamiento de textiles. Visitamos aquí la Iglesia de Santa Isabel, de un gótico muy sencillo con fachada de ladrillo rojo y en el interior, sus paredes blancas se combinan con detalles en madera oscura para dar una sensación muy natural. En 1927, una comunidad de monjas benedictinas tomó el relevo y, desde entonces, acoge un convento.
Al salir del Beguinaje nos encontramos con algunas de las Casas de Beneficencia o de Caridad. Repartidas por la ciudad, son las precursoras de nuestras viviendas sociales, pensadas para ayudar a los más desfavorecidos. La más antigua de ellas es la Rooms Convent que data de 1330. La entrada generalmente daba a un patio interior, que servía de huerto para cultivar hortalizas. Servían para dar cobijo a ancianos y enfermos que ya no podían trabajar y también a viudas y mujeres solteras. En 1796 las casas de beneficencia pasaron a ser propiedad de la Comisión de Casas de Beneficencia Civiles.
Pero aún no nos hemos adentrado, propiamente, en el centro urbano de Brujas.
Parque Minnewater o Lago del Amor
Puente Barge
Torre Polvorín. Antiguas Murallas
Casas de las beguinas
Nave interior de la Iglesia de Santa Isabel en el Beguinaje
Rooms Convent, la más antigua Casa de Caridad
Casa de Caridad fundada por Francesca Spanoghe en 1680
Joaki-007Ayer a las 21:59
maravillas10Ayer a las 21:29
angela.70Ayer a las 11:18
gkane13/06/2025
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