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Parece que un poder extraordinario ha estado juntando elementos para mantenerme libre de ocio.
Su estrategia ha funcionado muy bien, debo decir. Los minutos de mis días han hallado quehaceres productivos, atractivos, interesantes e increíblemente dóciles, porque les he variado según transcurren y parecen no agotarse, por el contrario, cumplen su objetivo.
Esto ha pasado del sosiego al clímax agitado del oficio. Y aunque la tecnología está a mi alcance, es esporádico mi poder sobre ella.
Sin embargo, estoy contenta.
=)
Bueno, extraigo de tan hermenéutico texto que no has tenido acceso a internet y que te ha sorprendido la cantidad de cosas útiles que ze pueden hacer en la vida. Eso está bien, conviene recordarlo de vez en cuando para que no se nos ponga cara de chip.
y a todo esto, ¿qué estudias?