var isMobileBrowser=false;
Cada PERSONA tiene la obligación y el precepto de reforzar y apoyar a su prójimo. Cada individuo debe LIBERAR su corazón de todo vestigio de algún mal sentimiento. Y con ojo de bondad debe mirar a su compañero, juzgándolo siempre para bien.
1 Pedro 4:10 Cada uno según el don que ha recibido, minístrelo a los otros, como buenos administradores de la MULTIFORME gracia de Dios.