La simiente de Abraham registradas en las promesas de su descendencia a JerUSAlem un pueblo de bendiciones cumplidas a sus patriarca para nuestras familias.
| Génesis 12:3: | Bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré; y serán benditas en ti todas las familias de la tierra. |
Estados Unidos y Gran bretaña dos hermanos en la bendición de Jacob otorgada a Jose en representación de sus dos hijos Manasés y Efraín.
| Génesis 48:20: | Y los bendijo aquel día, diciendo: En ti bendecirá Israel, diciendo: Hágate Dios como a Efraín y como a Manasés. Y puso a Efraín antes de Manasés. |
Nadie sabe exactamente qué pasará con la economía nacional y mundial en las próximas semanas y meses. Pero mientras los economistas y expertos hacen sus predicciones especializadas, Dios, que gobierna sobre el universo, ¡ha hecho sus propias “predicciones”, no conjeturas sino profecías infalibles, que serán una realidad gracias a su poder infinito!
En su Palabra, la Biblia, Dios revela lo que le espera a este mundo, incluidos los Estados Unidos de América y otras naciones específicas de habla inglesa. Las promesas y profecías de la Biblia, incluidas algunas ya cumplidas, esbozan una imagen inspiradora, alegre y llena de esperanza sobre el futuro de toda la humanidad.
En estos tiempos difíciles usted puede conocer la verdad sobre el futuro, toda la cual se encuentra registradas en la palabra de Dios . Comprender la identidad de los Estados Unidos en la profecía y entender por qué ha desempeñado un papel tan importante en la economía global le abrirá las puertas del conocimiento que cambiarán para siempre su forma de ver el mundo, aun su propio futuro.
Averigüe lo que Dios tiene que decir sobre estos asuntos, manténgase firme en la dirección que le señale, y él lo guiará al mejor resultado posible.
La bendición de Jacob nos acompaña hasta el dia de hoy en Jesús, llamado el Cristo el hijo de Dios el cual toma el control de toda la historia de la humanidad.
| 2 Corintios 1:20: | porque todas las promesas de Dios son en él Sí, y en él Amén, por medio de nosotros, para la gloria de Dios. |
