var isMobileBrowser=false;
En Nuestra Ciudad Romantica
Camuy En Su Pueblo.
Los ríos todos van al mar, y el mar no se llena; al lugar de donde los ríos vinieron, allí vuelven para correr de nuevo.
“La vida es como un inmenso mar en donde hay que aprender a navegar con serenidad y cordura, sin descuidarse, no sea que una marea alta derribe nuestra embarcación. A veces navegamos acompañados, otras tenemos que nadar solos en mar abierto, otras veces hasta nos toca naufragar en islas desiertas, pero es grande vivir con fuerza intensa, con la pasión por los sueños fundamentados en nuestra fe, y con el entusiasmo por las metas que regala la vida cada día. ¡Navega mar adentro!”
Habacuc 2:14: | Porque la tierra será llena del conocimiento de la gloria de Jehová, como las aguas cubren el mar. |
Sin tiempo para más, paso rápido a saludar. Quienes vivimos junto al mar, sabemos del maravilloso regalo de Dios.
Saludos