Camino del Cid: Por tierras de Gormaz.

Nos adentramos en tierras de Gormaz, y llegamos a la localidad de San Esteban de Gormaz, a la  que se llamó "Puerta de Castilla", siendo objetivo principal de ambos bandos durante la Reconquista. En el año 912 el conde Gonzalo Fernández repobló la plaza bajo el reinado del rey leonés García. Desde entonces, y durante todo el siglo X hasta  entrado el siglo XI, San Esteban cambió de manos cristianas a manos musulmanas en varias ocasiones, para ser conquistada por el Cid en 1084.

San Esteban de Gormaz, con una población actual de 3.000 habitantes, no solo ha conservado gran parte de su recinto amurallado, sino también sus dos ejemplares iglesias románicas:

San Miguel, del siglo XI obra del maestro Julián, pionera de los pórticos sorianos.

Y la  iglesia de Nuestra Señora del  Rivero de principios del siglo XII. El paseo por San Esteban nos conduce necesariamente al rí­o Duero, razón de ser de esta población, y a su puente medieval de 16 ojos.

En Osma, el Camino del Cid tuerce bruscamente hacia el sur, buscando Navapalos, por donde transitó el Campeador en su destierro. No lejos de allí, cerca de la localidad de Fresno de Caracena, Menénde Pidal fija la escena de la aparición al Cid, en sueños, del arcángel San Gabriel, recogida por el Cantar: 

I se echava mió Çid después que fo de noch,
un sueñol priso dulçe, tan bien se adurmió.

El ángel Gabriel a él vino en visión:
Cabalgad, Cid, el buen Campeador, ca nunca
En tan buen punto cabalgó varón;
Mientra que visquieredes bien se fará lo to.
Quando despertó el Cid, la cara se santiguó

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