Entre canales y puentes

Pernoctamos la noche del lunes día 9 en nuestro hotel situado en la localidad de Marghera y madrugamos el martes día 10 para enfilar el Puente de la Libertad, que con una longitud de casi 4 kilómetros nos lleva hasta la propia ciudad de Venecia. El Puente de la Libertad construido junto al antiguo puente ferroviario, fue diseñado en 1931 por el ingeniero Eugenio Miozzi e inaugurado por Benito Mussolini el 25 de abril de 1933. Nos deja en Piazzale Roma, desde donde nos dirigimos a tomar el vaporetto, que nos dejará frente al impresionante Palacio Ducal.

Y alli encontramos el primer canal y el primer puente: el Puente de los Suspiros. Une el Palacio Ducal con la antigua prisión de la Inquisición (Piombi), cruzando el Rio Di Palazzo. Es una construcción barroca del siglo XVII que da acceso a los calabozos del palacio. Debe su nombre a los suspiros de los prisioneros que, desde aquí, veían por última vez el cielo y el mar. Por tanto nada tiene que ver con la acepción romántica que algunos autores han utilizado como recurso poético.

Y naturalmente haremos nuestra travesía en góndola. Formando un cortejo nos adentramos en ese sinuoso entramado de canales, calles, callejones, callejuelas y patios que hacen imposible la orientación del visitante. Iremos descubriendo algunos de los 118 puentes que unen las distintas islas venecianas. El puente Tron, el de las Agujas, el de las Tetas, el Minich ..... que junto a edificios y palacios configuran un estilo inconfundible que da personalidad a Venecia.

Cuando por la tarde recorramos en vaporetto el Gran Canal, conoceremos el Puente de Rialto, el de los Descalzos, el de la Academía. Todos ellos de impresionante belleza.

Imagen propia: Puente de los Suspiros.