Lorca: La ciudad del sol

Imagen: Imagen: Jerónimo (Colegiata de San Patricio de Lorca -nocturna-)

9 DE JUNIO: DIA DE LA REGION DE MURCIA

En nuestro recorrido por esta comunidad, llegamos a la que posiblemente es la ciudad más bella de la región y una de las más bellas de España: Lorca.

La historia de Lorca se pierde en el tiempo. Poblada desde hace más de 5.000 años, ha conocido el paso de todas las civilizaciones que llegaron a la península. Conocida en época romana como Eliocroca (ciudad gobernada por el sol), la ciudad cuenta hoy con una población de 95.000 habitantes siendo la cabecera del ubérrimo Valle del Guadalentín. Lorca es conocida por su industria del curtido y la alfarería que aún hoy son un exponente de su calidad artesanal.

A pesar de los avatares históricos y naturales como el devastador terremoto de 1672 o la rotura del Pantano de Puentes en 1802, el paseo por la ciudad es una auténtica gozada, pues como señala el dicho popular "toda Lorca es un retablo".

Empezando por la Plaza Mayor o Plaza de España desde donde se accede a la Colegiata de San Patricio (s.XVI-XVIII) de estilo renancentista su interior se articula en tres naves, doce capillas laterales en los contrafuertes, coro y trascoro, girola con capillas radiales y torre-campanario en la cabecera. El conjunto de la plaza se completa con el Ayuntamiento edificio del siglo XVII construido inicialmente como prisión real por Alonso Ruiz de la Jara.

En el recorrido urbano encontraremos otros muchos monumentos de gran interés como los palacios de los Guevara, los Moreno, los restos de la Casa del Corregidor y las iglesias de San Francisco, de Santiago o el Santuario de la Virgen de las Huertas.

La ciudad está coronada por la imponente visión de su Castillo del siglo XII.En pie quedan dos torres de las treinta y cinco que tuvo (la Torre del Espolón y la Alfonsina) y donde se puede leer el lema de la ciudad: "Lorca solum gratum, castrum super astra locatum, ensis minan praxis, regni tutissima clavis",

Mención aparte merece su singular Semana Santa, con unos riquísimos Desfiles Bíblico-Pasionales, que los lorquinos, divididos entre blancos y azules, viven con extremada pasión.

Si vamos a Lorca no debemos dejar de degustar su "Guiso de trigo", un plato con sabor histórico genuino de esta ciudad.