Migas cuando llueve

Nunca entendí esa costumbre tan murciana de hacer migas cuando llueve. Quizá porque mi madre era de ascendencia alicantina de la comarca del Vinalopó. Y para hacer migas no miraba al cielo. 

Lo cierto es que me sigue sorprendiendo. Entiendo que por su potencia calórica puede ser un plato más propio de invierno. Y ni eso porque yo recuerdo de niño haberlas comido en verano. Mirando en internet, que parece tener respuesta para todo, se dice que dada la tradicional sequedad de estas tierras, cuando llovía las gentes del campo y de la huerta lo celebraban con una comida especial: un buen plato de migas (de pan o de harina) con sus noras, su longaniza, su tocino, sus ajos....

Y como esta pasada semana ha llovido (poco pero ha llovido) más de uno ha estado castigando sus muñecas para sacar a la mesa ese apetitoso plato. Y hasta yo mismo he aceptado la invitación de preparar una buenas migas. 

Imagen de internet