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Si hay un elemento que identifique universalmente a Segovia es el Acueducto. Esta impresionante obra de la ingeniería hidráulica romana, del siglo II, que alcanza los treinta metros de altura, con 167 arcos, recorre 16 kilómetros desde el manantial de la Fuenfría, hasta la ciudad. Está construido con sillares de granito colocados unos sobre otros, sin ningún tipo de argamasa entre ellos.
No parece obra humana. Por eso no es de extrañar que se llegara a pensar que una obra de semejantes características debía de ser obra de poderes sobrenaturales o más concretamente, obra del diablo. Y así lo afirma una vieja leyenda, que se ha transmitido de generación en generación. Dicen que una joven segoviana, harta de recorrer cada día el largo y duro trayecto hasta la fuente para proveerse de agua, pensó para si: "Vendería mi alma al diablo si mañana pudiera tener el agua a las puertas de mi casa". Naturalmente el astuto diablo no se hizo esperar y prometió a la joven levantar un acueducto esa misma noche. Hecho el trato y acompañado de una cuadrilla de laboriosos diablillos, trabajaron sin descanso tallando y colocando las inmensas rocas. Cuando al diablo le quedaba solo una piedra por colocar, se desató una tormenta seca y un gran relámpago iluminó el ambiente, de manera que los gallos cantaron anunciando que la noche había acabado. De esta forma la joven salvó su alma y el acueducto quedó levantado llevando el agua hasta los hogares de los segovianos. En el hueco que faltó por rellenar al diablo, es donde está ahora una figura de la Virgen del Carmen.
El acueducto se ha mantenido en funcionamiento a lo largo de los siglos hasta tiempos recientes, y quizás por eso haya llegado hasta hoy en día en perfecto estado. En el último cuarto del siglo XV, se hizo una primera gran obra de restauración, de la que se encargó el prior del monasterio cercano de los Jerónimos del Parral, llamado Pedro Mesa. Se reedificaron 36 arcos, con mucho respeto hacia la obra original. En 1992, debido al deterioro causado por la contaminación medioambiental fue necesaria una nueva restauración, de la que se encargó el arquitecto Francisco Jurado, cuyas obras duraron hasta 1999, aunque actualmente se cuestiona la idoneidad de esta intervención. En 2014 se retiró una canalización de plomo colocada en la parte superior de monumento y este mismo año de 2023 se ha sometido a una limpieza integral del acueducto en su tramo urbano.
Los romanos siempre cuidaron el suministro de agua a sus ciudades. Roma llegó a tener hasta doce acueductos. Aunque no siempre era necesaria la construcción de arquerías, que se hacían para salvar grandes desniveles. En su mayor parte, la conducción de agua se hacía por canales subterráneos o a ras de suelo. Por otra parte el suministro hidráulico podía quedar cubierto por pozos y por cisternas públicas o privadas excavadas bajo las casas. El buen estado de los acueductos y la red de cloacas, además de la sana costumbre de la higiene y el baño, evitaron epidemias tan terribles como las que arrasaron las ciudades en la Edad Media.
El Acueducto de Segovia fue declarado Monumento Histórico Artístico en 1884. Posteriormente, el conjunto de huertas y árboles que circundan a la infraestructura fue reconocido formalmente en 1947 como "Paraje Pintoresco". Y, finalmente, llegó la declaración de Ciudad Patrimonio de la Humanidad de parte de la UNESCO al casco fundacional de la ciudad de Segovia en 1985.
Del suelo al infinito
El diablo aún merodea por las cercanías del Acueducto, portando la piedra que le faltó por poner. En tanto se hace un selfie con su obra al fondo.
Impresionante tambien el reportaje de hoy .
Gracias por compartirlo con todos nosotros.
Un saludo.
Dicen que el diablo está en las pequeñas cosas pero también en las monumentales como dice la leyenda acerca de la construcción del Acueducto. Qué grandes ingenieros fueron los romanos, eso hay que reconocerlo. No serían tan cultos y filósofos como los griegos pero sabían muy bien lo que se hacían. Salvando la distancia eran "los americanos" de la época.
Las fotos que pones son fantásticas, no solo es la típica que todos hacemos sino que me entusiama la que has puesto desde abajo y sobre todo la del diablo que parece que se hace un selfie y que yo no conocía. Te felicito.
Un abrazo y buenas noches.
El acueducto de Segovia me encanta, es impresionante. Y eso que nunca lo vi en persona
saludos
Buenos dias mi querido Fernan y feliz domingo, Segovia es preciosa, un abrazo.
maravillas10Ayer a las 21:11
angela.70Ayer a las 17:14
Joaki-00722/06/2025
mebarak198118/06/2025
gkane13/06/2025