Sijs

Cuando hablamos de libros sagrados de inmediato pensamos en la Tanakh o biblia hebrea, en la Biblia cristiana o el Corán de los musulmanes. Pero nos olvidamos de importantes textos de las religiones orientales, que son básicos en el connocimiento de la espiritualidad universal. Precisamente esta mañana aparecía en prensa una imagen de unos niños jugando mientras tomaban un baño sagrado en el lago del Templo Dorado en Amritsar (India) con motivo del 413 aniversario de la colocación del libro sagrado de los Sij, el Sri Guru Granth Sahib.

El sijismo es una fe nacida en el siglo XVI en el contexto del choque en la India entre hinduismo e islam. Entonces, el fundador de este credo monoteísta, Gurú Nanak, dijo: «No hay hindúes, no hay musulmanes». La nueva religión nacería como oposición al sistema de castas característico del hinduismo, y como defensora de la igualdad entre todos los «hijos de Dios».

Para los sijs, su libro sagrado, el Gurú Granth Sahib es algo más que un libro. Lo consideran como su gurú perpetuo, como una nave que llevará al creyente a separarse del océano del materialismo, conduciendo así al alma humana a su destino final que es la Beatitud Absoluta. Para ello habrá de vencer los cinco vicios que corrompen la mente humana: lujuria, cólera, codicia, opulencia y orgullo o ego. El libro contiene las palabras de cinco de los diez gurús del sijismo, así como varios autores de otras religiones.

Los sijs tratan a su libro sagrado como si fuese humano. El original se custodia en el Templo Dorado (hay copia en cada templo) y «duerme» en una cama. Todas las mañanas, los fieles lo «despiertan» y lo colocan en su trono, en el «altar» del templo.

Los sij son cerca de 30 millones y se localizan principalmente en el estado de Punjab, aunque existen comunidades a lo ancho del mundo.

Imagen de internet: Templo Dorado de Amritsar, principal temmplo sij.