ASOMADOS AL GRAN BALCÓN

Esta faceta comunicativa no es exclusiva de un tipo específico de balcón, sino que está presente tanto en los balcones públicos oficiales, como en los institucionales-colectivos y en los particulares. Todos ellos tienen en común que lanzan algún tipo de información al transeúnte sobre lo que alberga su interior. Los oficiales se caracterizan porque no dicen mucho de cómo son, sino lo que son sus ocupantes. de hecho, suele reconocerse un edificio oficial (ayuntamiento, consejería, consulado, etc.) por la presencia de determinados elementos en sus fachadas y balcones, como las banderas.

Además de los balcones de edificios gubernamentales, hay otros balcones públicos, como los institucionales o vinculados a partidos políticos, asociaciones o cualquier entidad de carácter colectivo, que muestran sus mensajes a los viandantes.

Otros muchos balcones reflejan la identidad de sus propietarios, indicando quiénes son y dónde están —y, a veces, algún mensaje más—, como los de hoteles, academias, negocios, asociaciones y colegios profesionales que tratan así de llamar la atención de quienes transitan por la calle. 

(R. MORANT MARCO)

Los balcones siempre dan información de la personalidad de las personas que allí viven, como dice este texto, según estén adornados o no, cuidados o hechos un desastre. Lo que se ve desde la calle se asocia a sus propietarios. 

Lo mismo ocurre con los de los edificios públicos como es el caso de un Ayuntamiento. En el nuestro, que ocupa la parte noble de la Plaza Mayor, además de las banderas institucionales que están siempre se produce un fenómeno muy habitual. Cuando se recibe a grupos más o menos numerosos y sobre todo en las bodas civiles que allí se ofician, lo más señalado es abrir las puertas y que todo el mundo salga al balcón  desde donde se goza de una vista privilegiada de toda la plaza. Esta preciosa plaza que fue diseñada y construida por el arquitecto Churriguera en el siglo XVIII.

Aqui se puede ver el grupo escultórico que se le dedicó, a muy pocos metros de su obra, a la salida de la Plaza Mayor. Se le observa vigilando la elaboración de los planos.

Besos.