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Cuenta la leyenda, que un rey pidió a los sabios de su corte un anillo especial:
–Quiero que fabriquéis un anillo precioso y para ocultar en él un mensaje que pueda ayudarme en momentos de desesperación. Ese mensaje ha de ser muy breve para poder inscribirlo. Aquellos eruditos habían escrito grandes tratados, pero no sabían cómo darle un mensaje de dos o tres palabras que pudiera ayudar al rey en esos momentos en los que consideraba que esa ayuda podría marcar la diferencia. El monarca tenía un anciano sirviente, que le dijo:
–No soy un sabio, ni un erudito, pero conozco el mensaje que buscas, porque lo compartió conmigo un sabio hace tiempo-. El anciano escribió tres palabras en un pequeño papel, lo dobló y se lo entregó al rey con la advertencia: “No lo leas, mantenlo escondido en el anillo. Ábrelo solo cuando sientas que todo ha fracasado y no encuentres salida a tu situación”. El momento llegó cuando el país fue invadido y el rey tuvo que huir a caballo para salvar la vida mientras sus enemigos le perseguían. Llegó a un lugar donde el camino se acababa al borde de un precipicio. Y entonces se acordó del anillo. Lo abrió, sacó el papel y allí encontró el siguiente mensaje: “Esto también pasará”. Mientras leía aquella frase, los enemigos que le perseguían se perdieron en el bosque al errar el camino, y pronto dejó de oír el trote de los caballos. Tras aquel sobresalto, el rey logró reunir a su ejército y reconquistar el reino.
“No es solo para situaciones desesperadas, sino también para las placenteras. No es solo para cuando estás derrotado, también sirve cuando te sientes victorioso. No es solo para cuando eres el último, también para cuando eres el primero”.
(Cristina Tabernero)
Esto también pasará. Una frase que debemos aplicarnos en estos duros días que nos esperan. Nada hay que sea eterno, todo pasa y todo llega, hasta lo bueno. Como dice esta hermosa leyenda, la frase vale no sólo para los malos momentos sino también para los victoriosos, para que lo tengamos presente y seamos conscientes de que todo es transitorio. Que nada es para siempre.
Creo que poco más puedo añadir hoy. Sólo desearnos a todos, yo incluida, mucha paciencia y resignación y desear que cuando esto pase nuestras vidas no hayan cambiado demasiado.
Que el blanco y negro o gris, recupere pronto los colores vivos, luminosos y alegres que siempre tuvo, como la fachada de la foto.
Besos.
¡Que Dios te escuche, Maravillas!
Buenas noches .
La fachada de la foto me gusta y cuando la limpien pues eso, mejor aun .Esa farola es preciosa .
Y si, claro que pasará todo esta pesadilla , pero me parece que costará y tendremos momentos malos ...yo , ya sabes ..estoy de los nervios .
Pero bueno, hay que pasarlo y hay que , sobre todo, obedecer en todo lo que nos digan , creo que es muy importante .
Pena y vergüenza me dá ver tanta gente por las terrazas como si fueran vacaciones , bueno , mañana ya lo cierran todos.
Creo que , si solo una semana todo el mundo estuviera en sus casas sin salir, o al menos solo salir a comprar el pan y lo justo, seguro que pararia toda esta pèsadilla.
Un beso y cuidaros mucho.
Bonita farola y pocas quedan de este tipo
saludos
¡Me encanta la foto!
Claro que pasará... sólo espero que sea menos grave de lo que han anunciado y se pase mejor de lo que nos esperamos. Se están tomando las medidas necesarias, así que espero que la gente sea prudente y las tome también.
Besos.
¡Hola!
Una preciosa leyenda (recuerdo haberla leído en alguna ocasión) que nos enseña a relativizar un poco todos los acontecimientos a los que damos suprema importancia.
También esto pasará y a lo mejor habremos adquirido anticuerpos para combatirlo. Al fin y al cabo es como una gripe severa con el agravante de ser algo nuevo y desconocido y de su rápida extensión. Pero no hay que dramatizar...
Buen fin de semana. Saludos.
angela.69Hoy a las 12:45
Joaki-007Hoy a las 12:36
eliocroca2Ayer a las 22:12
corremundosAyer a las 18:46
astur_8202/05/2024