HABLAMOS SOLOS

¿Quién no se ha encontrado hablando solo en algún momento? Reflexiones en voz alta y a solas que transcurren mientras conducimos, preparamos la cena o cuando paseamos por un parque. Monólogos que suelen ser comunes entre los seres humanos. Porque, lejos de pensar que solo nosotros los hacemos, es fácil comprobar que hay muchas personas que lo practican. Son soliloquios y existen muchas razones por las que recurrimos a ellos. Nos ayudan a aclarar lo que sentimos, organizar el pensamiento, como ensayo verbal para aprender y retener la información o como forma de automotivarnos como refuerzo positivo. Hablar solo es una conducta generalizada en las personas, aunque la frecuencia y los motivos pueden variar según factores individuales y contextuales. No está limitada a un tipo específico de personalidad o carácter, sino que es una herramienta que utilizamos para alcanzar diferentes propósitos cognitivos y emocionales. “La edad afecta: cuanto más pequeños, más hablamos solos. Algunas personas más extrovertidas pueden hablar solas más frecuentemente, ya que tienden a procesar sus pensamientos en voz alta.Es una herramienta versátil y accesible que puede mejorar significativamente el bienestar y el rendimiento personal. Pero es importante estar pendientes si aparecen cambios repentinos como aislamiento de los demás, pérdida de contacto con la realidad, cambios importantes de humor y, sobre todo si aparecen alucinaciones auditivas.

(Ana Camarero)

Creo que todos en mayor o menor medida hemos hablado solos. Sobre todo cuando nos lamentamos de algo físico o mental o nos damos ánimos acerca de algo pero, aunque no es un hecho habitual,  no parece que en absoluto sea negativo. Como se ve en el texto de arriba tiene muchas ventajas siempre dentro de un orden, tampoco es cuestión de calzarse monólogos o soliloquios con nosostros mismos constantemente. Repetir en voz alta palabras o un número de teléfono son formas corrientes de soliloquio , lo mismo que hablar con las plantas o los animales.

Antes cuando se veía por la calle a alguien que iba hablando solo o incluso gesticulando se pensaba que tenía algún problema o al menos andaba algo perjudicado, pero eso ya no es así. La mayoría, si no la totalidad, de las perosnas que van hablando solas no es así del todo porque en realidad están hablando por teléfono con uno de esos pinganillos pequeñitos que no se ven y además se tiene tendencia a hacerlo a más alto volumen con lo que todos los que van por la calle y se cruxzan con esta persona se enteran de la conversación sin pretenderlo. También he observado que esto de hablar solos es una práctica muy habitual en las telenovelas sobre todo las turcas para hacernos partícipes de lo que están pensando en ese momento, como un aviso al espectador. 

Mientras tanto, saludo a estas bellas hortensias que nos regalan la vista: "Sois preciosas".

Besos.