Estos días, se ha podido ver a través de las redes sociales diferentes bandadas de patos «tomando» las vacías calles de Sevilla en busca de comida y acercándose a las pocas personas que transitan por las mismas o arrimándose a los vecinos de edificios cercanos al río Guadalquivir cuando aprovechan la hora de sacar la basura a los contenedores. Estas imágenes han empezado a ser frecuentes desde que se decretó hace ya más de una semana el confinamiento a causa de la propagación del coronavirus. Pero no sólo se han podido ver escenas de estos ánades por los barrios de Triana y Los Remedios o el entorno de la avenida de La Palmera, sino que a la presencia de los patos se han unido otros compañeros de viaje como son las palomas que habitan entre los árboles de parques y calles de la ciudad.
Varios vecinos han asegurado a través de audios de Whatsapp que han hecho llegar a este colectivo que «por la calle San Jacinto se han visto a los patos buscando comida y que algunos agentes de la Policía Local se han acercado hasta el Altozano para coger a los patos».
En otro audio, al que ha tenido acceso ABC, una vecina de Miraflores asegura haber visto «a los patos saltarse la valla en busca de alimentos, incluso hay algunos de ellos que no lo han podido hacer porque tienen las alas rotas». «Cuando salí a tirar la basura en Los Remedios les bajé una barra de pan para que comieran», explica otra vecina.
(Martín Laínez)
Esto es algo que está ocurriendo en muchos sitios urbanos. Y tiene su aquél. El hombre avanza y se establece en lugares que antes eran patrimonio exclusivo de los animales que vivían en plena libertad y a sus anchas y curiosamente al estar el ser humano confinado, las calles, las plazas y los parques se han vaciado y poco a poco los animales van recuperando terreno. Se ha visto hasta ciervos paseando tranquilamente por el centro, a delfines nadando tan felices en las mismas playas.
Y luego está el caso de las aves, como patos y, sobre todo las palomas, que compartemn con nosotros sus espacios y ahora, al no haber gente, no tiene tanto acceso a la comida y la buscan donde pueden. Los patos en Sevilla por El Altozano y por Los Remedios y las palomas por los mismos sitios pero con menos comida.
Las de esta tarde en la antena de enfrente, a su bola, ellas como siempre.
Besos.
Total, el mundo al revés, como suele decirse; porque este confinamiento no deja de ser una especie de cárcel, como si el ser humano estuviese en un parque antropológico y los animales estuviesen visitándolo.
Buenas noches .
El otro dia , vi por la tele que en un pueblo de Galicia .-creo.- habian visto un oso , que buscaba comida ..y varios ciervos en otro lugar y hasta un Lobo .
Y es que como bien dices , los animales están totalmente desorientados buscando comida .
las Palomas y los Gorriones , acostumbrados a picar esas miguitas que caen de las mesas de las terrazas , pues ahora se vuelven locos buscando comida .
No es asi "mis gorriones" que hace dias viene de 10 en 10..les pongo dos Bimbos y cuando me doy cuenta , ya han desaparecido...
Animo y un beso y no nos olvidemos de cambiar la hora , no es plan llegar tarde a la cocina ...0 al aseo...
Está claro que los animales también han tenido que adaptarse al urbanismo y básicamente se alimentas de restos de los humanos. Aquí está el caso de las gaviotas que antes se alimentaban de peces y ahora son omnívoras. Merodean los patios de los colegios a la hora de los recreos comiéndose los bocatas y los bollicaos que los chicos dejan abandonados.... los restaurantes del área portuaria, donde la gente les arroja las cabezas de las frituras de pescado.... o matan a gorriones y palomas.
Que tengas un buen domingo. Saludos.
El otro día vi en el facebook unas imágenes de animales encerrados en las típicas jaulas de los zoológicos y demás. Y decían las imágenes, que ahora nos estamos enterando de qué es lo que sienten ellos cuando los tenemos en cautiverio. Yo nunca he estado a favor de esas cosas, pero cuando te lo dicen de esa manera, y más ahora que lo estamos viviendo en nuestras carnes, no pude evitar que se me revolviera todo por dentro.
Ahora los animales están campando a sus anchas sin que haya un ser humano que enturbie su libertad... pero hay otros, que están tan acostumbrados a convivir con nosotros, que ahora desesperadamente buscan nuestra compañía y todo aquello que sacan de nosotros...
En fin, como se suele decir, nunca llueve a gusto de todos.
Ahora se han cambiado las tornas, y somos nosotros los que estamos enjaulados.
corremundosHace 43 minutos
Joaki-007Hoy a las 07:15
eliocroca2Ayer a las 22:12
angela.7020/06/2025
larocuky18/06/2025
